Día 18
-Yo se que es difícil, solo inténtalo
Le dijo antes de levantarse de la cama y salir de la habitación. Samuel entro al baño con su teléfono y envió un corto mensaje a Estefanía diciendo que no podría ir esa noche.
En la mesa Zeus jugaba con los cereales haciéndolos migajas sobre la mesa mientras con la boca producía ruidos parecido a explosiones. Samuel lo miro extrañado, no sabia que tenia esa manía, la misma que él tenia a su edad.
-Buenos días papi-le saludo con un puño de cereales en la mano con una gran sonrisa que lograba cubrir esas ojeras que hacían su pequeño rostro un poco triste.
Como siempre una montaña considerable de hotcakes en medio de la mesa. El desayuno trascurría en risas y bromas sin sentido que lograban incomodar en ocasiones a Samuel o a Guillermo pues esa costumbre se había vuelto nueva. Zeus reía y se quejaba de el dolor de estomago que eso causaba.
y de repente cuando Samuel de forma graciosa comenzó a discutir sobre quien era el mas holgazán antes de estar juntos, Zeus dejo de reír.
-Papá ¿Porque tu no traes un anillo como el de papi?
No es que fuese algo grave pero a Zeus le parecía extraño.
-Yo lo guardo, no quiero que se maltrate.
Pero eso era mentira, no tenia ni la mas remota idea de donde estaría ese anillo. Guillermo bufo dejando el cubierto caer.
-El cuidadoso le decía.
Todo iba bien, fingían de maravilla aunque algunas veces les parecía que era de verdad. Pero resultaba que todo se caía a pedazos. Zeus rio muy fuerte, echando la cabeza para atrás al igual que Samuel.
En el buro había una imagen de Samuel Y Guillermo el día de su boda que para cumplir uno de los tantos deseos que compartían, había sido un reto realmente difícil. Habían que tenido que luchar contra su familia para poder tener esos anillos pero para Samuel ya había perdido su significado. Zeus tomo aquella foto con mucho cariño y la llevo hasta la mesa.
-Me gustaría algún día tener una foto así-dijo
-Fue un infierno poder una foto así-Dijo Guillermo.
-Tus abuelos-se refería a los padres de Samuel-Nos hicieron la vida imposible, es un milagro que hoy estemos juntos y te tengamos a ti.
Samuel parecía dolerle las palabras, no por ser algo ofensivo si no porque eran recuerdos porque había jurado entregar cuerpo y alma por estar junto a Guillermo, no importaba lo que los demás dijesen, no importaba lo que su padre dijese.
.-.-.-.-.
-Yo te crie como un hombre-Le grito su padre
-¡No porque yo ame a Guillermo dejo de serlo!
-Para mi si, al igual que para tu madre. Me has decepcionado Samuel.
Y le dio la espalda para dejarlo ahí parado a unos cuantos segundos de soltar a llorar. Por supuesto que dolía, ese hombre que le acababa de gritar había sido por años su ejemplo a seguir y las ultimas palabras que habían salido con tristeza de sus labios era claro ejemplo de que él no era un hijo ejemplar.
.-.-.-.-.
Guillermo hablaba entusiasmado de cada detalle que había existido en aquella ceremonia. Pareciera que lo hacia adrede, pero no sabia que eso le dolía a Samuel y él prefirió callar. Había olvidado tantas cosas pero por desagracia -tal vez- Guillermo recordaba cada una de ellas.
Los padres de Samuel no había asistido a esa ceremonia, no podían soportar tal atrocidad. Guillermo sabia perfectamente que era de cierto modo odiado pero si eso implicaba su felicidad junto a Samuel, estaba bien, podría con ello.
Después cuando adoptaron a Zeus, la madre de Samuel le dio todo su apoyo a él y a Guillermo, Samuel era su único hijo y solo quería que fuese feliz. Cualquier padre quiere eso para su hijo. Samuel quería eso para Zeus.
Pero Samuel siempre vivió con esa idea, había decepcionado a sus padres y cuando recordaba las miles de peleas por esa razón se ahogaba en el alcohol. Pero esa era solo una de las miles de razones por las que lo hacia.
-¿Verdad Samuel?-escucho la voz de Guillermo. No tenia idea de lo que hablaba pero solo asintió y sonrió. Vio a Zeus que escuchaba atento todo lo que Guillermo decía, esa misma expresión cuando escuchaba un cuento de hadas o un cuento de héroes. Sus ojos se hacían un poco mas grandes y casi no parpadeaba.
Por la tarde prepararon unos bocadillos y jugaron, dibujaron y vieron la tv como antes.
Por la noche, después de que Samuel, por primera vez en mucho tiempo leyera un cuento para Zeus, llevo a Guillermo hasta la habitación, aunque no lo estuviese viendo Zeus porque se suponía que por eso lo hacían.
Guillermo se quito la playera y de nuevo Samuel pudo ver sus costillas y esas pequeñas marcas. Y se atrevió a preguntar.
-¿Qué son esas manchas? ¿Te duelen?-Se acerco, por supuesto que estaba preocupado. Parecían signos de anemia, de algo le había servido estudiar enfermería.
Negó con la cabeza.
-¿Has ido al medico?-asintió-¿Qué te dijo?
-Que solo eran manchas por el sol-Mintió
Ninguno de los dos quería terminar peleados porque eso es lo que hacían últimamente, hasta por la cosa mas insignificante.
Se acostaron, Samuel leyó unos papeles que supuestamente eran del trabajo mientras Guillermo miraba de nuevo imágenes en su teléfono. De vez en cuando le mostraba una a Samuel mientras sonreía. Pero todo en silencio. Había tantas cosas de las que querían hablar pero se las callaban.
-Buenas Noches, guille-Se quedo en silencio y lo miro a los ojos. Le había dicho Guille.
-¿Samu?-Susurro
-Dime.
-¿Puedo abrazarte? solo esta noche
Era tan extraño pero ya extrañaban sentirse uno al otro. Nunca sabían cuando seria la ultima vez que se abrazarían.
——————————————————————————————
Lo siento por no poder subir ayer :c Estoy con examenes en el colegio y unos cuantos problemas personales. Pero aqui lo tienen. Existen muchas pistas y muchas incognitas. ¿Samuel dejara a Guillermo? CHAN CHAN CHAN! D: Espero que no T.T
ESTÁS LEYENDO
Un Mes. -Wigetta.
FanfictionTreinta días acordados y un mar de decisiones egoístas con un pequeño niño de ojos dichosos en medio de situaciones que desconoce. 𝑪𝑶𝑳𝑨𝑩𝑶𝑹𝑨𝑪𝑰𝑶́𝑵: 𝑭𝑨𝑩𝒀 & 𝑴𝑨𝑹𝒀. 𝑵𝑶 𝑺𝑬 𝑨𝑪𝑬𝑷𝑻𝑨 𝑵𝑰𝑵𝑮𝑼𝑵𝑨 𝑨𝑫𝑨𝑷...