Capítulo 5

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Narra Pablo
Por suerte para los dos la gente no vio aquel beso si no la caida, desde ese momento Valentina no me ha comentado nada, solo me ha dado su número de teléfono, en su mirada parecía arrepentida ¿Por qué lo estaría? Temo que tenga novio o esté casada pero si lo tuviera me lo hubiera comentado, o eso pienso yo. Lo más importante es que he podido saborear sus tiernos labios y la experiencia no ha estado mal, más bien, la besaría cien mil veces más y es que creo que me he vuelto a enamorar. Pero por un momento necesito despejarme de ella aunque sea inevitablemente imposible. Agarro la guitarra y empiezo a tocar algunas notas, deseo terminar el próximo proyecto, ver de nuevo a mi banda que tanto les echo de menos y a mis fans, abrazarles, que canten conmigo y ¡Hasta emocionarse al verme! Hay veces que no comprendo el motivo de sus lágrimas hasta que me cuentan lo que mi música ha podido ayudar. La verdad es que nunca me acostumbraré a sus gracias porque soy yo el que les debo tantas gracias que esa simple palabra se queda corta.
Después de varias horas componiendo decido llamarla, pareceré pesado pero necesito escuchar otra vez su voz. No me lo coge, tal vez esté ocupada o lo tenga en silencio, y son estos momento cuando mi cerebro recurre a mi parte pesimista. ¿Y si le ha pasado algo? Le envió varios WhatsApp y la llamo más veces, no da señales de vida. Cojo mi chaqueta de cuero, mi bufanda y me dispongo a salir.
Las 19:00 de la tarde
Siempre he pensando que el Invierno es una etapa muy deprimente, se hace de noche muy pronto, hace frío y solo dan ganas de estar en tu casa tumbado en frente de la chimenea, como haciamos mis hermanos y yo de pequeños después de estudiar. Llamo varias veces a la puerta de su casa y nadie contesta. Mantengo la calma y lo único que se me ocurre es sentarme delante de la puerta a esperarla.
2:00 de la madrugada
Una voz suave me despierta, al abrir los ojos veo a Valentina con los ojos llorosos, me doy cuenta de que estoy arropado con una manta negra.
-¿Y esto?-pregunto algo confuso, recuerdo haberme quedado dormido mientras la esperaba.
-Habrá sido la vecina que me ha llamado preguntando por ti-acaricia su pelo formando pequeños rizos-¿Qué haces aquí?
-Esperándote-me levanto del suelo, un poco confuso, desde que no me desvele del todo seguiré atontado-Llevo desde las siete esperándote.
-¿Tanto?-pregunta ella extrañada abriendo la puerta de su piso.
-Te esperaría toda la eternidad-y me da un pequeño beso en los labios, cumpliendo todos mis deseos, que también me quisiera.
~Nota de la autora~
Holaa! ¿Qué os parece? Que mono es Pablito jaja :) ¿No os quedáis con la intriga de que hacía Valentina para no aparecer por ningún lado y hacerlo tan tarde? :o Todo esto se descubrirá mañana jaja Besotees
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No voy a perseguirteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora