Narra Pablo
Varias semanas después
Había quedado hace media hora con mi hija en el chiringuito que tantos recuerdos me traen. Hace una semana le dije a la discográfica la idea de hacer una edición especial sobre mi último disco donde meteríamos Estrella y yo la canción que le hicimos a Valentina. A ella le hacía mucha ilusión, al entrar al lugar de grabación ella se asombraba al ver todo. Me comentó que ya había grabado algunas cosillas en la academia a la que va pero eran tan pequeñas que no le daban importancia, en cambio, lo que hicimos iba a ser una gran cosa, éxito total, comentaba ella.
Tuve que ocultar la identidad de Estrella por el motivo de que se les escapen algo, aunque confio plenamente en ellos pero esto es un tema delicado. Nos lo pasamos genial grabando, sus gestos me recordaban mucho a ella, hubo un momento de lágrimas por parte de ella y de los productores. He de confesar que es una canción demasiado triste pero gracias a ello llegué a lo más alto de la música. Si quieres transmitir lo que se siente en la vida siempre hay momentos donde quieres dejar de vivir.
Pronto saldrá a la luz pero por ahora hay que mantenerlo oculto. A lo lejos veo a Estrella cogida de la mano de un chico alto, fuerte, con el pelo liso, rapado por los lados y los ojos azules. Me levanto de la silla para saludarles.
-Este es Lorenzo-me presenta-Este es Pablo-me da un codazo en las costillas asegurándome de que él no sabe nada.
-Lo conozco-le doy la mano en plan de saludo y todos nos sentamos en la mesa excepto Lorenzo que marcha a buscar un camarero.
-Sigues teniendo la misma cara de tu madre cuando era niña-ella pone los ojos en banco sonrojándose.
-¡Oye! Que ya soy una mujer-comenta tímidamente, reimos.
-Si, pero haber que haces con el Lorenzo...
-¡Papá!-grita sonrojánsose aún más-¿Para que me habías llamado?-me pregunta cambiándome de tema.
-Pues... Estando tu novio...-ella observa por encima donde se encuentra él, entonces pillándome desprevenido me lleva un poco más lejos de donde estabamos antes.
Nos sentamos en el mismo lugar donde le comenté la historia que ella desconocía de su vida.
-El caso... Es...-dudo en contárselo pero debo hacerlo-Me traslado a Los Ángeles y no sé cuando volveré-me mira apenada y yo igual a ella, ahora que nos habíamos reencontrado y teníamos una gran relación debo irme por asuntos de trabajo.
-Pero... ¿Volverás?-asiento-A lo mejor de que vuelvas... Ya tendrás nietecitos...-ella ríe y lo hace para enfadarme.
-Tan pronto no... No quiero ser un anciano...-los dos volvemos a reir-Seguramente vuelva para verte con un vestido blanco...
-No, no, yo quiero un vestido negro.
-¿Negro? ¿Desde cuando la gente se casa con vestidos negros?
-Se está poniendo de moda, además no quiero una boda de esas sosas y aburridas, que los invitados lloran bla bla-se levanta y empieza a bailar-Quiero... Una boda divertida, buena música y... ¡Qué la gente disfrute!-no puedo parar de reir con las barbaridades que dice-¡Algo diferente!
-Tienes muchos pájaros en la cabeza.
-Me lo suelen decir a menudo-los dos vemos como Lorenzo nos llama desde el chiringuito.
Abrazo a Estrella fuertemente como si abrazara a Valentina, la echaré mucho de menos, es lo más cercano que tengo a ella y no quiero perderla.
-Te quiero pequeña-le acaricio la mejilla-Anda, ve con él-ella sonrie y marcha dándose varias veces la vuelta para verme.
Las despedidas son difíciles pero nosotros sabemos que esto no lo es. Que nos volveremos a ver y sé que lo haremos a lo grande.FIN.
~Nota de la autora~
Hola!!!! Bueno pues este es el final. Espero que os haya gustado esta pequeña historia. Gracias por vuestro apoyo ¡Me animais a seguir escribiendo!
Estoy pensando en crear otro fan fic... pero antes quiero leer y las dos cosas a la vez no puedo hacer jajaja. Ya volveré coranzoncitos ♥
Tw: @MariTFIOS