Más allá de una flor

3. Instinto

Después de ese primer encuentro, los que siguieron en vez de relajarlo y acercarlo a Liu Huang, provocaron que algo muy oculto en el interior de Shen Yuan tratara de escapar de su lado racional, instándolo a llevar a cabo conductas para nada aceptadas: la más fuerte en aquel momento era la de acurrucarse con el joven que caminaba su lado, así podría pasar lo que restaba de la tarde refugiado en su abrazo.

El bueno para nada del sistema no dejaba de presentarle misiones opcionales como "tomarse de las manos", "tropezar accidentalmente y caer sobre el pecho de su prometido", "pedirle ayuda para comprender algún movimiento de combate", "hacerle ojitos", entre otros.

¡¿Qué rayos pensaba el sistema?! Todas las misiones parecían sacadas de las fantasías de una adolescente escribiendo un fanfiction de romance, ¡totalmente descabellado!

[Sistema: Le recuerdo al usuario, este sistema no cuenta con un cuerpo físico, por lo cual no puede ser "descabellado".]

«Ja, ja, muy gracioso», respondió fastidiado.

Si se le permitía ser sincero, a veces ganar puntos de aquella forma sonaba bastante atractivo, después de todo continuaba juntándolos para poder cambiar algunas partes de la historia, entre ellos uno de los más importantes era evitar la fatalidad a la cual estaba encadenado su Jiu-ge.

Con anterioridad, el sistema, ya le había entregado misiones opcionales, entre ellas aquella que cambió la vida a dos niños esclavos a quienes ahora consideraba sus hermanos, ¿cómo es que pasó de proporcionar misiones serias a solo incentivar el fanservice?

La propuesta del sistema parecía un ganar-ganar, él complacería su lado omega además de juntar puntos y el sistema obtendría... ¿material para una buena historia? Como sea, de algo le serviría al sistema esas misiones opcionales. A pesar de todo había un gran inconveniente: su prometido parecía ser esa clase de persona seria a la cual ningún chiste del planeta le causaría gracia, esa clase de persona que a la mínima provocación explotaría.

Jiu-ge, le advirtió la clase de hombre que era una vez volvieron al resguardo de su pico, al parecer el joven ya había tenido algunos encuentros con el discípulo de Bai Zhan, sin que ninguno fuera agradable.

El Bruto, como le llamaba Jiu-ge, por lo general solo pensaba en pelear, entrenar, cultivar o hacer prevalecer lo correcto.

—Su mente no da para más. Deberías pedirle permiso a Shizun para visitar el Pico Xingxing y solicitar una nueva adivinación de otra pareja.

A pesar de todo aquello dicho por su Jiu-ge, al final quería intentarlo, si debía tener sí o sí un compañero, ¿por qué no tratar de que funcionara entre él y Liu Huang?

Sin embargo volvía al mismo punto: aspirar a que su relación diera un avance.

En su otra vida murió virgen sin una sola experiencia en el cortejo, no tenía idea de lo que debía de hacer. Liu Huang demostró cierta amabilidad al acompañar a Shen Yuan a lugares a los que él deseaba como el pueblo bajo la montaña, beber té en algún prado de Qing Jing, salir a caminar alrededor de Qing Jing (nunca visitaban Bai Zhan, en palabras del propio Liu Huang era un lugar peligroso para Shen Yuan), incluso lo llegó a acompañar en sus lecturas cuando se encontraba estudiando en la biblioteca de su pico.

Aquel día se dirigían montaña abajo hacia un punto del río que cruzaba el pueblo, según le habían mencionado algunas shijies aquel lugar poseía una atmósfera sacada de alguna obra de arte, quería pasar un rato tranquilo bebiendo té y tal vez comiendo algunos dulces, se lo propuso a su prometido quien aceptó sin objetar.

Cuando llegaron ahí, Shen Yuan se lamentó de que no existieran las fotografías en aquel mundo.

El lugar robaba el aliento de cualquiera, a su alrededor se encontraban varios árboles de durazno en su apogeo; con el suave murmullo del río de fondo, la luz dorada del sol iluminaba la escena de forma exquisita. Casi tenía ganas de ir por Jiu-ge, para que se maravillara con aquella escena y se decidiera por pintarla.

Si pudiera se quedaría toda la tarde admirando la belleza del lugar, en cambio su prometido ya se dirigía a un árbol a tomar asiento bajo su sombra, Shen Yuan solo pudo guardar un suspiro para después encaminarse al lugar.

En el corto tramo siguió pensando en maneras de cómo demostrar de forma más directa sus sentimientos, siendo interrumpido de nueva cuenta por el ruidoso sistema.

[Sistema: Para ayudar al usuario, este sistema tiene una nueva misión opcional.

Misión: Siga su deseo omega por una vez.

Puntos B: 100

Plazo para llevar a cabo la misión: lo que resta de la tarde.]

«Más que desear ayudarme, pareciera que solo quisieras tener fanservice», Shen Yuan tuvo que hacer un gran acopio de voluntad para no rodar sus ojos, era obvio con la cantidad de puntos exagerada que otorgaba.

[Sistema: ...

Tal vez, pero el usuario debe saber que también este sistema lo hace por su bien.]

Y con eso cerró la ventana de diálogo.

Mordió el interior de su boca en lo que sopesaba la propuesta del sistema.

Eran muchos puntos, más de los que había ofrecido en algún punto de la trama que no fuera algo importante. Sin la aparición del protagonista, aquellas misiones con un puntaje de recompensa mayor a 50 eran escasos, incluso podía contar con su mano todas las misiones que había recibido de ese tipo a la fecha. De igual forma, al pasar más tiempo con Liu Huang, su parte omega le rogaba que buscara más atención de parte del alfa, siendo aquel instinto casi imposible de soportar.

Ya se encontraba a pocos pasos de donde su prometido se acomodó.

Llegando a una resolución, con paso firme se posicionó justo a su lado.

Aquel movimiento estaría bien para empezar.