Fever Love

25

Yunho se quedó con la mente en blanco, no había sentimientos, ni palabras en ese momento, todo era tan irreal, sino fuera por el llanto de los padres de Minhyuk hyung y Seo Yong, pensaría que aquello era solo una pesadilla y que cuando abriera los ojos, esos dos estarían ahí, frente a él burlándose por el acento que adquirió al irse a vivir a la isla de Jeju.

Pero no era así, aquello era la realidad, y no le quedaba otra opción que aceptarlo, aunque claro, ese no era el momento, quizás ese momento nunca llegaría realmente para él, después de todo, las dudas que comenzaron a surgirle no lo iban a dejar tranquilo hasta que conociera la razón por la que sus dos amigos de la infancia murieron.

- ¡Seo ah! - gritaba como loca la pobre madre, quien era abrazada fuertemente por su esposo para que no fuera por la fotografía que adornaba la entrada de la casa funeraria - ¡Seo-ah!

¿Por qué lo hicieron?

Para Yunho no existían motivos suficientes para tomar la cobarde decisión de terminar con tu propia vida, nada justificaba el daño que dejaban a las personas que continuaban con vida, tampoco creía que existiera problema alguno que no tuviera solución como para tomar esa salida sencilla, así que, aunque quisiera sentir dolor, lo que más experimentaba era rabia.

¿Por qué? La última vez que vine a visitarlos los dos se encontraban felices...

- ¡Largo de aquí! - Yunho dejo de observar la fotografía de Seo, en donde lucia tan hermosa, para descubrir a quien le impedían presentar sus respetos a la difunta, especialmente porque era la mama de sus amigos quien lo estaba exigiendo - ¡Asesinos! - grito ella nuevamente.

Tras aquella palabra, Yunho giro sobre sus talones para ver de quien se trataba y observo que las personas a las que llamaba ¨asesinos¨ la señora eran Hong y San, a quienes conoció como los respectivos novios de sus amigos, frunció el ceño al ver que esos dos agachaban la cabeza como si realmente aceptaran ser los culpables.

- ¿Cómo se atreven a mostrar el rostro aquí después de lo que hicieron? - ahora fue el padre quien hablaba, el odio era evidente en su voz - ¡Sin vergüenzas! ¡Largo!

Yunho observo que Hong intento dar un paso hacia adelante, pero que San le tomo del brazo y negó con la cabeza, poco después ambos hicieron una reverencia para retirarse del salón, ninguno de ellos trato de explicarse, simplemente respetaron los deseos de los mayores, aunque Hong si miro hacia atrás varias veces antes de que salieran del edificio.

Con que asesinos...

Definitivamente, él no podía darse el lujo de preguntarle a los padres de sus difuntos amigos por qué etiquetaban a esos dos con esa palabra tan cruel, no obstante, tampoco dejaría que sus preguntas quedaran sin respuesta, tendría que mudarse de nuevo a la ciudad para poder conocer los motivos por los que su hyung y Seo acabaron con sus vidas.

- No imagine que sería posible, pero hoy te ves más hermoso que ayer - Mingi enarco una ceja, pero no comento nada, al parecer la mala suerte lo seguiría por un tiempo, nunca imagino que su trayecto normal a la escuela pudiera ser interrumpido de aquella manera, y mucho menos por aquel sujeto - Awww, cuando te enojas, te ves más hermoso - continúo halagándolo el mayor sin perder su sonrisa cínica.

Ambos siguieron caminando hacia la escuela, y como era de esperarse, con cada paso que daban no faltaba quien se les quedara viendo e iniciaran murmullos entre sí, no es como si aquello le preocupara a Mingi, al ser el líder de las porristas y ser amigo de personas influyentes en la escuela, estaba acostumbrado a que hablaran de él a sus espaldas o a que le inventaran rumores, sin embargo, en esa ocasión, realmente le estaba molestando que tuviera más atención de lo normal por el recién llegado.