- Athena t/a! - la organizadora de la fiesta llamaba a los padres de los niños que habían asistido para retirarlos. - tu madre ya esta aquí.
La pequeña castaña de 7 años corrió muy frenética a su madre, abrazándola.
- hola, bonita - dijo ella dándole un beso en la frente - como te fue? Te divertiste?
Ambas comenzaron a caminar hacia la parada del bus.
- si, mami! Mis compañeros me hicieron reír mucho y hubo muchos juegos!
- me alegro mucho, amor.
Ambas llegaron a la parada para dirigirse a su casa cuando unas personas comenzaron a acercarse peligrosamente a ellas.
Ellos las rodearon con cuchillos en sus manos para dañarlas, t/n ya se había librado de su avatar pero aún conservaba aquellas habilidades que la ayudaban desde antes.
- que quieren de nosotras, mami? - preguntó la pequeña asustada.
- no lo sé, cariño. Solo escóndete detrás de mi. - ella se puso en posición de pelea para poder contrarrestar los movimientos de su contrincante, aún recordaba su entrenamiento con cierta pelirroja.
Un hombre se acercó rápidamente a ella pero pudo esquivarlo con facilidad.
- Upi! Mi madre los destrozará a todos! - gritaba la castaña emocionada.
Su pelea continuaba cuando se dio cuenta que no podría con todos. Eran demasiados.
Uno de los horas arrojó un cuchillo para atravesarla, pero una figura blanca se apresuró interponiendose entre ellos, logrando que el cuchillo se clavara en su espalda.
Ambos se miraron a los ojos. Hace años que no se veían.
- pero- que? Que haces aquí?
- no creo que sea el mejor momento para hablar - su capa las cubría a ambas, protegiendolas de los demás cuchillos.
Marc se separó de ellas para lanzar sus características lunas dagas a sus contrincantes, derrivandolos con el primer toque.
- gracias - dijo t/n mirándolo con agradecimiento - creo que debo ayudarte con eso - dijo apuntando a la herida de la espalda.
- si, esta bien.
- se conocen? - dijo la pequeña hablando por primera vez luego del encuentro con el vigilante.
- si, es un... - dijo t/n mirándolo de nuevo - viejo amigo...
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- viejo amigo? - t/n cosía la herida de la espalda de Marc en una habitación alejada a la habitación de Athena, para que no pudiera escuchar.
- que querías que le diga? Que eres un ex-novio?
- no? si? No se. - dijo dándose la vuelta para verla - que fue de tu vida, linda?
- bueno, conseguí trabajo, me mude tuve a Athena. Quieres saber algo más?
- es mía? - preguntó sin más.
Hubo un silencio.
- t/n, es mía? - dijo parándose para acercarse cada vez más a ella - dímelo.
- por que lo piensas?
- su edad concuerda. - dijo mirándola a los ojos, los tenía llorosos. - su cabello se parece al mío, tiene mis ojos. Usa el collar de luna que te di en nuestro primer aniversario. Sus ojos tienen ese brillo que tenía la luna esa noche que nos besamos en el tejado de nuestro departamento.
- tiene 7, si? - dijo t/n rompiendo en llanto.
- mierda, lo sabía. - dijo Marc, agarrando su cabeza - por que no me lo dijiste?
- desapareciste Marc! Pensé que habías muerto por un tiempo. Y luego... - dijo llorando aún más - luego me enteré del embarazo. No sabía que hacer, hasta pensé en no tenerla, pero luego lo pensé mejor y me di cuenta que iba a ser una parte de ti que aún seguía conmigo.
Marc se acercó rápidamente a besarla apasionadamente.
- perdón, linda... perdón por haberte dejado sola. Por haberte hecho pasar por esto sola. No me merezco nada de lo que tengo...
- cállate... - le contesto ella, dejandole otro corto beso - se por lo que pasas. Esta bien si estas confundido y por lo que pasaste de niño.
- nunca debí dejarte sola. - dijo pegando su frente con la de ella - quiero recuperar el tiempo perdido, si? Me lo permites? Quiero reconectar con ella y contigo. Quiero que seamos una familia, me dejarías? - lágrimas salían de sus ojos suplicando con todo su ser.
- te amo, Marc. Nunca te deje de amar. Puedes volver.
Ambos se dieron otro corto beso y se abrazaron. Hasta que unos pequeños brazos los rodearon a ambos.
- si! Tengo papi! - la pequeña Athena festejaba mientras sus padres se reían.
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Ya llevaban un año casados y era momento de contarle la noticia a Athena.
- linda! Puedes venir al comedor, por favor? - t/n le gritó desde la planta baja de su casa.
La pequeña bajó corriendo las escaleras de la casa.
- no corras, que te puedes caer y lastimar.
- déjala jugar un poco, mi luna. - Marc se acercó por atrás para abrazarla por la cintura ahuecando su mano en su vientre bajo. - estas lista?
- lista para que mami?
- bueno, te tenemos una sorpresa - dijo t/n sonriendo - bueno, dos. Quieres la buena para ti o la mala?
- la buena!
- bueno - esta vez hablo Marc - pudimos lograr ponerte mi apellido, cariño.
Athena festejo de la alegría. No era que no le gustaba el apellido de su madre, pero esta insistía de que deba tener el de su padre.
- ahora quiero la mala. - dijo sentándose sentándose el sofá.
- tal vez no es tan mala para ti - dijo Marc susurandole al oído a t/n. Athena arqueo una ceja, igual a como lo hacia su padre.
- estoy embarazada, de un varón. - dijo agachandose a su altura - tendrás un hermanito!
- en serio!? - dijo confundida y un poquito enfadada, pero algo contenta porque al fin tendría compañía. - le darán mi cuarto?
- no, linda. Tendrá el propio.
- mejor. - dijo levantándose para dirigirse de nuevo a su habitación - hagan lo que quieran! - gritó desde la cima de las escaleras.
- bueno, no lo tomo tan mal - dijo Marc dándola vuelta a t/n.
- por ahora - dijo ella dejando un beso corto en sus labios - cuando se de cuenta que los bebés lloran toda la noche no querra saber nada de nosotros.
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