Los Monstruos También Aman. ©

Extra

《Como anuncié hace poco,  no tengo celular y uso el de mi mamá; pero este extra lo tengo que publicar si o si, cabe señalar que esto no cambia nada en la historia es solo una escena hermosa que imaginé con la canción: No hay nadie más de Sebastián Yatra. Espero lo disfruten tanto como yo. ❤》

Eloisa.

Nos encontramos en una pequeña fogata en medio del bosque,  estoy recostado en las piernas de Athan mientras Andreus afina una guitarra, Adrián pelea con los mosquitos y Axel "mi admirador" está escribiendo en una libreta,  luce tan calmado con su cabello negro cayendo como cascada por su frente y su rostro concentrado en lo que sea que escribe.

—¿Qué te parece? —Athan me enseña lo que estaba dibujando.

Me entrega un dibujo de mi rostro alumbrado por el fuego, justo como estoy ahora; sin duda tiene demasiado talento y me pregunto porque no le muestra su talento al mundo.

—¡Malditos mosquitos! —gruñe Adrián poniéndose de pie!— ¿vamos a cantarle a la loca si o no? —mira a Andreus a la vez que me señala con ira.

—Loca tu abuela —respondo— ¿Como que cantar? —pregunto sin entender.

Andreus al fin logra afinar la guitarra y empieza a tocar, las melodías son delicada y perfectas para esta noche estrellada. Athan vuelve a hacer que recueste mi cabeza en sus piernas mientras Andreus empieza a cantar.

—Recuerdo aquel día, como si fuera hoy —su voz sale ronca pero delicada, es una voz que provoca querer llorar de euforia.

Sigue cantando y no puedo evitar sonreír por la hermosa letra de la canción.

—Feliz cumpleaños —susurra Athan besando mi frente. Es el mejor regalo de cumpleaños, ni siquiera recordaba que hoy es mi cumpleaños.

—Voy a cuidarte por las noches —canta Andreus con delicadeza y como si se tratase de un video recuerdo las veces que se colaba por las noches en mi habitación.

—Voy amarte sin reproches —Athan continúa cantando y me sonríe demostrando lo mucho que siente cada palabra.

—Te voy a extrañar en la tempestad —Adrián canta lo que me sorprende pues carga un humor de perros pero aún así disfruto recordando las veces que disfrutamos y a la vez discutimos por cosas banales.

—Y aunque existan mil razones para renunciar, no hay nadie más — el último es Axel quien me señala el cielo con una pequeña sonrisa en sus labios.

Hago lo que me pide y puedo ver a las estrellas brillar pero lo mejor es que hoy parece hacerlo de una manera especial hasta que poco a poco se escucha algo ser lanzado y el cielo se ilumina con fuegos artificiales.

Definitivamente esta es una de las  mejores experiencias que he tenido en toda mi vida.

N/A:

Amo a Sebastián y escribir esto fue como un sueño cumplido espero lo hayan disfrutado.

#SeLesQuiere. ❤