Lucha por la vida [KookJin] {Adaptación}

Capítulo 32

Jin podría decir que a lo largo de su vida pocas cosas lo habían sorprendido. Pensó que enterarse de que tenía un enorme tumor en la cabeza y cáncer esparcido por su cuerpo sería la mayor sorpresa de su vida. Pero se equivocó.

—¡Maldito Wang!— Jin lanzó contra la pared el hermoso florero que alguien había llenado de flores y llevado a su habitación. Después de muchos meses, esa semana había sido la única de la cual podía presumir que había sido una buena semana.

Sin dolor. Sin mareos.

Sin ningún otro efecto secundario.

No obstante, estaba más que claro que ese año en particular era una mierda. Observando nuevamente el informe que amablemente Jackson Wang estratégicamente le había hecho llegar mediante la intervención del padre de Jin comprendió muchas cosas. Y porque no expresarlo, estaba más que sorprendido. Esa no la vio venir. La puerta se abrió.

—SeokJin. ¿Qué sucedió? Escuche…— Era su padre. Al levantar la cabeza para querer tranquilizar a su padre. Se encontró también con JungKook. Que miraba el desastre de la alfombra.

—Estoy bien— Suspirando. Pasó por en medio de su padre y JungKook. Al pasar le entregó el sobre color amarillo a JungKook. Mejor dicho. Se lo estrelló contra el pecho. —Hazme un favor y almacena esto en la base de datos. Seguro que me será de utilidad en el futuro— Dejando a los hombres confundidos. Jin salió de la casa. Se envolvió más en la chamarra que había tomado del armario junto a la puerta. Realmente el invierno en irlanda era peor que en Nueva York. Estaba cayendo una ligera lluvia. Así que pasear no sería lo ideal. Lo que menos deseaba era recaer al hospital ahora por culpa de una neumonía. Así que emprendió su camino a la casa principal. Una taza de chocolate caliente de su madre sonaba realmente bien. No había nada que un abrazo de su madre y una taza de chocolate no arreglaran.

Su madre le cuestionó por la razón de su repentino rostro triste, pero Jin negó que sucediera algo. Mientras tomaban la taza de chocolate en la cocina. Su padre se reunió con ellos. Sin embargo, no le dijo nada sobre lo sucedido después de que él se marchara. Jin estudió un poco su rostro tratando de averiguar si su padre habría leído esos documentos que tan descuidadamente había estrellado contra JungKook. Esperaba que no lo hubiera hecho. Ahora que ya pensaba con más claridad, estaba comprendiendo su error. Ciertamente, era muy jodido todo y hacerle daño a su padre de esa forma. Sería realmente más de lo que estaba dispuesto hacer.

Pasó toda la tarde con sus padres. Para cuando cayó la noche, fue una suerte que la lluvia hubiera aumentado a casi convertirse en una gran tormenta. Su madre le pidió que se quedara a dormir esa noche en la casa principal y Jin aceptó encantado.

Fue hasta que estaba recostado sobre la cama cuando cayó en cuenta que había dejado su teléfono móvil en su habitación. No había visto a JungKook en todo el día.

<<¿Y qué esperabas? ¿Qué corriera tras de ti para darte una explicación?>>

De repente, Jin sintió frío y tuvo poco que ver con el frío clima de diciembre. Se mordió el interior de la mejilla con tanta fuerza que sintió el sabor de la sangre.

No debería haberle dolido. No debería haber importado.

No era como si no hubiera sabido que JungKook tenía un pasado y algo le ocultaba. Siempre había sabido que no debería permitirse apegarse a un chico "heterosexual". Idiota. Él era un idiota. Rindiéndose, alcanzó el teléfono de la mesilla. Como el único número que sabía de memoria era el suyo propio fue al que llamó. Al tercer tono JungKook contestó dándose cuenta seguramente que el número que llamaba era el de la casa principal.

—¿Tienes idea de lo jodido que es imaginarte follando con mujeres de mi familia?— dijo Jin duramente. Solo hubo un silencio en respuesta, pesado y tenso.