Lucha por la vida [KookJin] {Adaptación}

Capítulo 26

Fue inquietantemente fácil fingir que entre él y su mayordomo no sucedía nada más que una simple relación profesional. Jin estaba un poco avergonzado de admitirlo, pero realmente chuparle la polla a JungKook lo hacía sentir mucho mejor. Su ansiedad ante su incierta existencia estaba controlada. Había decidido no comentarle esta situación de momento a su terapeuta. Ya que esa separación paulatina que el hombre había sugerido para nada estaba llevándolo a la práctica.

Ciertamente, Jin estaba realizando más cosas por su cuenta. Por el momento contestar correos electrónicos y llamadas importantes lo estaban haciendo sentir que estaba comenzando a volver al juego. Jackson Wang era el que representaba un verdadero reto. En los últimos meses, Jin no había asistido presencialmente a las juntas mensuales del Consejo Directivo. En cambio, le eran enviados los reportes para su lectura y análisis. Claro que él no se había enterado de nada, pero JungKook había hecho un gran trabajo hasta el momento. Ahora que por fin había tenido la primera llamada con el hombre. El CEO deseaba una reunión personal con él.

<<No en esta vida>>

Al menos de momento. Contemplar cara a cara a ese hombre o a cualquier otro que representara un reto para Jin. Sería demasiado para atentar contra su ego. Jin era consciente de que no volvería a ser el hombre que fue. Pero tampoco deseaba ser un cadáver caminando. Estaba delgado, fuera de forma, demacrado, demasiado pálido y sin mencionar su falta de cabello. Gracias al maquillaje de Halloween se había enfrentado a sus amigos y a sus esposos. Pero la mirada atenta de HoSeok y TaeHyung no dejaban lugar a dudas de que ellos sospechaban de que algo malo estaba sucediendo.

Era todo un reto tratar de volver a incorporarse en su vida de una manera que fuera cómoda para él en ese momento. Volver a Irlanda representó todo un reto. Por una parte, seguía no estando cómodo con la idea de la exnovia de JungKook rondando por ahí. Pero no podía arriesgarse a quedarse en Nueva York y que alguien lo viera.

Ante los demás la relación de JungKook y él era la misma, pero Jin podía sentir la tensión y la frustración aumentando entre ellos cada día que pasaba. Desde aquel día. Jin no había vuelto a mamarle la polla a JungKook. Además, había sido una lucha contra el tiempo, ya que, en un par de días, Jin había tenido que ocuparse de algunos pendientes antes de regresar. Sonrió. Dar la autorización de volver a intentar con la fertilización in vitro fue la cosa más fácil y difícil para él de hacer. Pero estaba hecho. Tenía algo que esperar y de lo cual hacerse una ilusión. Seria, padre. Tendría por quién luchar, aunque estuviera solo. Ahora tenía una posibilidad, un posible futuro. Estar esperando noticias positivas respecto al tratamiento de fertilidad lo mantendría ocupado y emocionado. De vuelta en Irlanda no había mucho que hacer. Y era una forma agradable de soportar la tensión. Porque cada vez se hacía mucho más densa entre ambos. Sabía que JungKook también estaba tenso. Era más que obvio por la forma en que esos ojos oscuros a veces seguían sus labios cuando Jin hablaba. Eso causaba que Jin sintiera su boca seca mientras imaginaba...

Él aplastaba rotundamente esos pensamientos traidores, pero seguían resurgiendo. Si JungKook fuera otro tipo de hombre, simplemente admitiría y exigiría que Jin hiciera lo que tanto deseaba. Pero JungKook fingía que no lo deseaba. 

<<O tal vez desea que sea su exnovia quien lo hiciera>> Jin hizo una mueca. Hasta el momento no tenía referencias sobre que JungKook se hubiera encontrado con esa mujer en los días que llevaban de regreso en Irlanda. <<Tal vez simplemente debes de dejar de hacerte tonto y hacer lo que deseas hacer>> Ciertamente si lo hacía. Jin era el culpable. Estaría nuevamente asaltando a JungKook. Eso no era un problema. Pero había tenido la esperanza de… Rechazó esos pensamientos. Por supuesto que JungKook jamás se lo pediría en voz alta. Él no deseaba eso. Jin tendría que dejar de escuchar los consejos de YoonGi. <<¿A qué hombre no le gusta una mamada?>> Era la pregunta favorita de su amigo. Y la respuesta era más que obvia. Solo bastaba con observar la forma en la que los ojos de JungKook se posaban en su boca cuando Jin se humedecía los labios. O la forma en que su propia polla se agitaba mientras se imaginaba cayendo frente a su mayordomo, bajando su cremallera y tragándose ese gran, grueso... El apetito sexual perdido de Jin había regresado y en ese preciso instante no era un buen momento.