.- ¿Dónde aprendió el capitán América a robar coches?- pregunta Natasha sentada en el lugar del copiloto con los pies en el salpicadero.
.- En la Alemania nazi y lo hemos cogido prestado, quita los pies de ahí.- le regaña.
.- Muy bien tengo una pregunta para ti, si no quieres no la contestes, aunque creo que si no la respondes eso sería una respuesta.-
.- ¿Cual?- la interrumpe el chico para que hable de una vez.
.- ¿Es el primer beso que has dado desde el año cuarenta y cinco?- intento no reírme.
.- ¿Tan mal lo he hecho?- pregunta el hombre.
.- ¡Yo no he dicho eso!-
.- Por el tono es como si lo hubieras dicho.-
.- No, no es así, tenía curiosidad por saber cuánta práctica tenías.-
.- No se necesita práctica.- intenta defenderse el hombre.
.- Todo el mundo necesita practicar ¿Verdad pequeña?- me mira desde el asiento de delante.
.- Sí, claro.- respondo mirando al hombre.- Estoy segura que a Aaron no le importaría practicar contigo.- ambas nos reímos.
.- No ha sido mi primer beso desde el año cuarenta y cinco, tengo noventa y cinco y estoy vivo.- se intenta defender.
.- ¿Y no hay nadie especial?- sigue preguntando la chica.
.- Aunque no lo creas es difícil encontrar a alguien que comparta tus vivencias.-
.- Se podría decir que Steve está esperando a la pareja de baile perfecta.- tras mis palabras el hombre me mira por el retrovisor pensativo.
.- Bueno y... ¿Qué hay de ti?- se gira a mirarme Natasha.
.- Bueno, hace mucho tiempo deje de practicar.- esquivo el tema como puedo.
.- Es una pena con lo bonita que eres seguro tienes a muchos hombres a tus pies.-
.- No te creas, al menos no como quisiera.- le respondo a la mujer cabizbaja.
.- Acabo de darme cuenta de algo, nos hemos centrado en Steve y sus amoríos pero ni siquiera sabemos tu nombre.-
.- No creo que sea importante.-
.- Lo es si vamos a pasar tiempo juntos.- comenta el chico.
.- Vale, soy Mary, Mary Carter.- el hombre me mira por el retrovisor brevemente abriendo y cerrando la boca buscando las palabras indicadas.
.- ¿Mary Carter? ¿La pequeña Mary?- pregunta al fin.
.- Esa misma.- sonrío de medio lado.
.- Oh por dios, ahora tiene sentido, lo de la feria del futuro, la pareja de baile...¿Cómo...?-
.- Es una larga historia capitán.- le digo.
.- Vale ¿Os conocéis de antes?- pregunta Natasha.
.- Así es.- respondo.
.- ¿Cuántos años tienes? ¿Veintitrés?- vuelve a preguntar.
.- Veintisiete.- la miro algo apenada.- Desde el cuarenta y seis.- miro fugazmente al chico.- Pero esa historia os la contaré otro día, tal vez cuando dejemos de ser fugitivos.- miento pues yo nunca dejaré de serlo.
Una vez llegamos a un lugar apartado y obviamente abandonado hace siglos, nos bajamos del coche para entrar al lugar.
.- El archivo salió de estas coordenadas.- informa Natasha.
.- Yo también.- ambas lo miramos para luego entrar y con ayuda de la linterna del móvil buscar pistas.- En este campamento fue donde me entrenaron.-
.- ¿Lo notas cambiado?- pregunta la chica a mi lado.
.- Un poco.- Steve se queda mirando el campo y sé que está recordando sus años de entrenamiento.
.- Fuiste muy valiente Steve.- pongo una mano en su hombro intentando animarlo y él asiente con la cabeza en agradecimiento.
.- Estamos en un punto muerto, no hay señales térmicas, ni ondas, ni siquiera de radio.- capta nuestra atención la mujer.- Quien escribió el archivo debió utilizar un router para despistar.-
.- ¿Qué pasa capitán?- pregunto al ver como mira fijamente una especie de bunker.
.- El reglamento militar prohíbe almacenar munición a menos de quinientos metros de los barracones.- lo seguimos.- Este barracón no debería estar aquí.-
.- Ahí no hay munición.- le digo.
Rompe el candado con el filo del escudo y entramos tras él, bajamos unas escaleras encontrándonos con unas largas filas de mesas de oficinas.
.- Esto es Shield.- comenta una vez acciona las luces la rusa.
.- Por lo menos en sus inicios.-
Pasamos por unas salas hasta encontrar en una pared tres retratos colgados.
.-Aquí está el padre de Stark.- dice Nat.
.- Howard.- le sigue el hombre.
.- ¿Quién es la chica?- tras su pregunta ambos nos miramos.
.- Mi hermana mayor.- respondo caminando por la estancia.- Ey aquí hay algo.- digo para luego mover una estantería de la pared que resultó ser una puerta.
.- Si estás trabajando en una oficina secreta... ¿Por qué escondes el ascensor?- comenta el hombre. Nat pone el código correcto gracias a su móvil de súper espía y bajamos a una sala oscura.
.- Esto es raro.- les digo.- Nunca había visto esta sala.-
.- ¿Tú estuviste aquí?- pregunta la pelirroja.
.- Visitaba a mi hermana en los inicios de la creación de Shield pero... esto es nuevo para mi.-
Entramos en la sala y el ascensor se cierra a nuestras espaldas, a medida que avanzamos las luces se encienden dejando a la vista varios monitores antiguos.
.- Los datos no pudieron salir de aquí, esta tecnología es antigua.- dice la chica observando todo a su alrededor.
.- Nat.- la chica me mira y le señalo un dispositivo para conectar memorias. Una vez la conecta los monitores se encienden.- ¿Sigue funcionando?-
.- ¿Iniciar sistema?- se escucha una voz robótica del monitor principal.
.- Si.- pulsa en el teclado Natasha.- ¿Jugamos a un juego?- se ríe.- Es de una película...-
.- Lo sé, la he visto.- la interrumpe Steve.
.- Rogers Steven, nacido en mil novecientos dieciocho.- una imagen borrosa en el monitor empieza a hablar con acento extranjero.- Carter Mary Anne, nacida en mil novecientos diecinueve y Romanoff Natasha Alianovna, nacida en mil novecientos ochenta y cuatro.-
.- Es como una grabación.-
.- No soy una grabación.- le responde a la pelirroja.- Quizá no sea el hombre que era cuando el capitán me hizo prisionero en mil novecientos cuarenta y cinco pero existo.- ambos miramos la pantalla donde aparece la imagen del hombre.
.- ¿Conoces a esta cosa?- le pregunta la chica.
.- Zola.- digo dando un paso atrás como si pudiera hacerme algo.
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𝗥𝗲𝗶𝗻𝗮 𝗥𝗼𝗷𝗮
FanfictionEl mundo es un lugar peligroso pero para salvarlo están ellos, los héroes a los que todo el mundo alaba, a los que todo el mundo quiere. Pero ¿Qué pasa con los que no son como ellos? Son los malos, los villanos, da igual lo que te haya ocurrido, si...