POV #3

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POV #3: Historia

15 años después. Arezzo, Italia.

Jenn/Nina:

Conocerán a mis padres, lo que iniciaron y pasaron por todo para que yo pudiera estar aquí.

Naim y Sofía. Su historia interesante que nunca me han contado. Mi tío Jean me ah dado algunas pistas pero nada concreto.

Jay tampoco la conoce y eso que él vivió cuando ellos tenía problemas y pasó todo. Mi tía Mae describe a mis padres de una manera muy extraña, casi inventada, nada comparada con lo que ellos son ahora.

Mi papá, un hombre que a pesar de sus 38 años se sigue viendo bien. Mi madre con la misma edad luciendo su delgada figura, siendo hermosa con su carácter tan suave con el que tranquilizaba a papá.

Realmente se querían, de pequeña siempre queria oír se conocieron, me imaginaba una historia súper romántica donde hubo amor a primera vista, y se casaron pronto.

Como en los cuentos de hadas.

Tengo 15 años y aún no me sé la historia, Jay creo que la sabe, pero tampoco me la cuenta, mis tíos siempre se quedan callados diciendo que su historia fue "diferente" al cliché que siempre espero oír.

Y lo digo porque yo, a mi corta edad estoy enamorada. Me gusta un chico que es 3 años mayor que yo, y me da miedo contarle a mis papás, ellos son muy cuidadosos con respecto a Jay y yo.

Y de que no permitirán una relación de ese tipo, es decir, mi papá no lo haría, mi mamá es un poco más comprensible, ella de seguro lo tomaría con más calma y si se negase lo haría con gentileza, mi papá no, él lo haría fríamente.

Por eso me sudan tanto las manos, estoy afuera de la cocina, esperando entrar para darles una pista. Todos los días los 4 nos sentamos a cenar algo que cocina mamá con Jay, quien es muy bueno en la cocina y a mi se me quema hasta el agua.

Con el corazón latiendo al mil por ciento y los nervios más altos que nunca camine hacia dentro.

Ahí estaba Jay con un delantal blanco moviendo un líquido espeso en una olla con una concentración increíble. Mamá está cortando unas verduras con un delantal morado. Papá esta es una esquina recargado comiendo una manzana mirando a mamá.

—En vez de mirarme tanto podrías ayudar a cortar las verduras para la sopa—dijo mamá sonriéndole a papá.

—Mmm tal vez, pero me gusta verte cocinando, te ves increíblemente hermosa—le respondió el con un mirada coqueta.

Como dije, su relación era increíble.

Mamá rodo los ojos divertida y siguió con lo suyo.

—Iugh, ya empezaron con sus frases empalagosas—bromeó Jay.

—Déjalos, tú cómo estás más solo que un perro con pulgas no lo entiendes—los defendí.

—¿Y tú si? Mamá y papá parecen 2 adolescentes en pleno romance.

—Son tiernos—respondí.

—Jay que tú seas un amargado como tú madre no es culpa nuestra—dijo mi padre divertido.

—Ay si tú, ¿amargada yo? Deja a Jay, por el momento tiene la cabeza fría, por lo menos no es un pervertido como tú—replicó mi madre.

—Te gusta este pervertido, por eso te casaste con él y tuviste 2 hijos suyos—mi papá mordió su manzana.

Cierto, mamá y papá se llamaban pervertido y amargada, en ocasiones, son apodos algo raros pero son divertidos y originales.

—No seas presumido ¿si?—le dijo ella.

Mi buen amor || Naim DarrechiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora