Capitulo 5

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Sofía:

Esto no podía estar pasando, esto tenía que s r una gran alucinación, un sueño. Mierda parecía todo una real, nadie hablaba, solo nos mirábamos.

¿Qué demonios hace el aqui? ¿Porque carajos esta aquí? ¿Quien mierda le dijo que queríamos que volviera?

No podía hablar, ni moverme, él estaba muerto, para mi lo estaba, todo se congelo, no escuchaba nada, solo lo miraba a él, iba a ponerme a llorar, con una solo verlo otra vez me pondría a llorar.

"Te abandono ¿porque llorarías por el?

Buen punto, quería darle una cachetada, quería golpearlo mientras lloraba, quería liberar todo ese coraje que acumule todos esos meses, luego recordé porque no podía, tenia a mi hijo en brazos, Naim abandonó mi mirada para ver a Jay confundido, este ya había parado de llorar, y al igual que yo observaba a Naim.

Naim iba a decir algo pero antes de eso, agarre bien a Jay, me di media vuelta y subí al segundo piso casi corriendo, estaba llorando, ¿porque?, no lo sé, solo se que él no debió volver.

Entré corriendo a la habitación donde antes estaba antes, dejé a Jay en el piso sobre una colcha con sus juguetes, y yo me paseaba por la habitación como loca.

—¿Estás bien Sofi?—preguntó Mae.

—Llegaste muy alterada ¿que pasó?—preguntó Darían.

—Yo...el...no se como...está abajo—dije casi sin poder hablar.

—Cálmate un poco, estás muy alterada, ¿quien está abajo?—dijo Darían.

—Mejor voy a ver—dijo Mae y se levantó de la cama en la que estaba acostada.

—¡NO!, espera, no bajes por favor—le dije a Mae—El volvió, y vio a Jay.

—Oh mierda, estamos hablando de...—dijo Mae y Darían la interrumpió.

—Naim.

—¿Que mierda hace el aquí?—dijo Mae.

—No lo se, y viene acompañado, de una chica—dije.

En eso empezaron a tocar la puerta y yo me puse todavía más alterada.

—Mierda, mierda, mierda—dije.

Entró una empleada con la comida que Mae le pidió.

Naim de alguna manera había cambiado físicamente, el pelo lo tenía algo más largo, era más alto, y se notaba que se había afeitado, sus trajes eran diferentes a lo que solía usar antes, y esa chica...vaya, era linda, era delgada, pelo largo, y a pesar de ir solo con unos jeans ajustados y una blusa sin mangas se veía bien.

¿Que era ella de él?

Eso no me importa.

Sin duda debían ser pareja, o amigos, no lo sé, y no debía alarmarme, ni siquiera debía enojarme, él y yo habíamos terminado con lo que tuvimos.

Había visto a Jay ¿no?, si lo había visto se preguntaría si es mi hijo, o un sobrino o algo, al final llegaría a la misma conclusión, y se daría cuenta de que es su hijo.

¿Y si me lo quitaba?, mierda, él tendría el derecho ¿no?, no quería ni imaginar lo que iba a pasar, ¿pero que mierda hacia el aquí?, si él se había ido ¿para que volver?, cada quien había echo su vida.

—Eso es imposible, él no puede estar aquí, y menos en esta casa—dijo Mae—Jean primero lo mata antes de que entre.

—Es cierto, y viene acompañado, tal vez y lo trajo Orson—me dijo Darían.

Mi buen amor || Naim DarrechiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora