POV #2

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POV #2: CITA

Arezzo, Italia.
1 año y 7 meses antes de la boda.

Sofía:

¿Que mierda hacia? Ponerme bonita para un imbecil que no conocía bien.

Nuestra "primera cita". La llamo mi padre.

Al carajo la cita, no quería hacer esto, arreglarme para alguien que no me caía bien era un tanto estupido.

"Es tu obligación".

Palabras de mi padre cuando me negué rotundamente a tener una cita con Naim. Ni siquiera tenía en claro lo que quería en mi vida y de la noche a la mañana me quieren casar con un desconocido.

Estupido ¿no?

Y ahí me ven buscando un tonto vestido para ponerme esta noche, ni siquiera sabía a donde me llevaría o si me mataría y botaría a un rio.

La verdad suena mucho mejor ese final para mi que estar casada con el, y es que es un cabezota. Cree tener al mundo a sus putos pies, a las mujeres con las bragas húmedas, sin mencionar el estupido ego que se carga.

Y lo mujeriego que es, tratar a las mujeres como juguetes es horrible. Todo él es horrible, y lo es más que después me llamarán "señorita Darrechi", iugh.

Rezaría por no tener ese apellido en mi vida NUNCA.

Y dirán "que exagerada" "no es para tanto". Oh, si estuvieras en mi lugar harías y dirías lo mismo que yo.

Sin contar que no podía encontrar nada lo bastante horroroso para ahuyentarlo y que no se me acerque nunca más.

Patética.

Y él debería estar muy sonriente ¿no? Aunque igual traía una cara de "nadie se me acerque o lo castro".

Dios que en el camino me dé un paro al corazón y me muera ahí mismo. Amén.

No iba a ponerme vestido, no señor, no dejaría que un egocentrico como él me viera las piernas de palo que me traía. Los pantalones holgados están de moda ¿no? Y una blusa manga larga, color caca de ser posible. Bueno, bueno, blanca.

El cabello nada peinado, todo rebelde, no se veía mal, pero el punto era joder esta cita y él me odie para no querer verme más. Botines color negro y un leve maquillaje y con "leve" me refiero a que me veo como una chica drogada, las ojeras, los labios levemente pintados de rojo, etc, etc.

Horrorosa. Perfecto.

Bueno no tanto, pero a lo qué él está acostumbrado no es a "esto". Es a vestidos ajustados, tacones altos, maquillaje de payaso y lindos cuerpos. No tenía un cuerpo de súper modelo, tenía volumen pero no llegaba al top de belleza.

Me mire cansada al espejo, pasándome una mano por la nuca deseando jamás haber nacido, o si pero siendo un perro de las Kardashian, tenían una vida más fácil.

Vale, estaba completamente lista para joder esta noche. Que divertido ¿no les parece?

Bueno, ahora sólo faltaba que él llegara por mí porque obviamente lo haría, mientras tanto golpeare las paredes imaginando que es su rostro, digo, para matar el tiempo.

Mi buen amor || Naim DarrechiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora