Alexander
No entiendo, porqué motivo, estoy empezando a meditar demasiado las cosas. Vamos, Alex... Ella es tu amiga, y sabe lo que hace y con quien sale...pero... ¿Y si el intenta propasarse?, parece, pero les aseguro que no es la blanca palomita que pretende ser. ¿Y si voy a buscarla?.... ¡No! ¡Ni se te ocurra!... Se enojaría y dejaría de hablarte idiota. Bien... Guardemos la calma y date cuenta de como te pones. No iré, porque no quiero lastimarla, es su vida y yo no tengo idea de porque me pongo de esta forma.
Pasé el resto del día, tratando de distraer mi cabeza con otra clase de cosas, pero por más que quería, no encontraba como sacar el tema de Summer de la cabeza. Bien, son las 8:00 pm y espero ya haya regresado a casa, es algo tarde. Tomé el teléfono de la casa y al teclear su numero, pensé más de dos veces en si apretar el botón de llamar o mejor esperar hasta mañana para hablar con ella. Y aquí viene mi impulso tonto. Uno, dos, tres sonidos y escucho la voz dulce de Summer.
-¡Hey!... ¿Ya estas en casa?- dije algo nervioso.
-Vengo entrando.- dijo ella algo seca.
-¿Pasa algo?, te noto extraña.
-No, no te preocupes, solo estoy algo cansada... Fue un largo día.- respondió. Pareciera como si el salir con Ian cambiara nuestra relación.- Extrañaba tu voz.- dijo para mi sorpresa.
-No puedes estar hablando enserio.- dije sin saber lo que decía.- Yo te extrañaba a ti... Pero estabas con Ian.
-¿Qué?- dijo ella más alerta.- debes estar bromeando.- dijo ella soltando una pequeña risa.- ¿Cómo lo sabes?
-Supongo que soy como un brujo...- dije al notar mi error. Parecen celos de mi parte.
-Tal vez... ¡Pero debo contártelo todo!¿estás en casa? Si, supongo que si, o no estaríamos hablando por teléfono.. Ya sabes, no tienes un teléfono celular, lo cual sigo pensando que es raro.- golpe bajo.- Llego en 5... Bueno... 10 para que me cambie... Olvídalo, voy para allá.- y colgó.
No se si sea muy buena idea, el que venga para hablarme de Ian. Y no solo porque me sentiría incomodo escuchando cada cosa que tenga que decirme de él, sino que también es un tipo que no me agrada ni un poquito... Y tristemente, está detrás de mi mejor amiga. Y como era de esperarse, Summer en menos de 5 minutos, ya estaba tocando a mi puerta como si su vida dependiera de ello.
-Es un caballero... Pfff.. Y tan guapo... Su familia es algo rara.. No sé.
-¿Rara?- pregunté tratando de fingir interés. Aunque sinceramente, no le encuentro.
-Sus padres son algo... Especiales, ya sabes... El tipo de familia que se cree demasiado buena para el resto de las personas...- dijo como si viera hacia la nada.- Pero supongo que les agradé... No dejaban de decir que les parecía muy hermosa.
-Lo eres Summer... No entiendo porqué te sorprende.
-¿Esta todo bien?... Te escuchas algo distante.
-Bueno... No he dormido bien, tal vez sea eso. Me duermo temprano por todo el trabajo que me hace realizar mi padre, así que, supongo que es eso.
-Creo que ya fue mucho por hoy, debería dejarte descansar.- dijo algo apenada. Entonces yo en un impulso, jalé con suavidad de su delgada muñeca, al tiempo que me levantaba de la cama.
-Buenas noches.- dije posando mis labios en su rosada mejilla, por primera vez. Ella se puso por completo roja, lo cual me hizo sonreír. Diablos.. Se ve tan tierna.
-Buenas noches Alex.- dijo pasando las yemas de sus dedos por donde marque mi beso, apretando los labios intentando suprimir una sonrisa. Apresuro un poco el paso hacia la puerta de mi habitación. Y salió lo más rápido que sus piernas le permitieron.
ESTÁS LEYENDO
Inexplicable
RomanceSu mirada era fría. Era un hielo, buscando un brillo de luz que derritiera su corazón. Sus pómulos eran altos, su sonrisa grande y coqueta, que dentro ocultaba una dentadura perfecta y brillante. Sus hombros eran delicados, pero al mismo tiempo pod...