Summer
Comienza a cansarme la presencia de Chloe en mi casa y en mi vida, pero mi madre la tiene en una perspectiva tan diferente a la que es real, que es aún más complicado que decida hacerme caso. Ella piensa que solamente le tengo envidia, y eso me da nauseas de tan sólo pensarlo. <<¿Yo?¿envidia de esa...?>>
-Jade, tenemos que hacer un plan para que salga corriendo hasta casa de sus papis y nos deje tranquilos de una vez por todas.
-Dímelo a mí, ya no soporto verla haciéndole ojitos a Jason, y que él no le diga absolutamente nada. Es más, incluso creo que le gusta que lo haga.
-Vamos... Alexander me dijo que no le hablaría más, y siempre los veo salir platicando de su clase de cálculo.-Lo digo tan dolida, que pareciera que me llega la idea a la cabeza, de que mi novio pudiese cambiarme por otra.
-Pero Alex jamás se fijaría en ella.
-Te diría lo mismo de mi hermano, pero ambas sabemos como es. Además de que ella fue <<el amor de su vida>>.-Parece que mi comentario es cero atinado, pues enseguida noto la tristeza en el rostro de Jade.-Lo lamento... Es sólo que me siento... Frustrada.
-Sí, Summer. No eres la única, créeme.
Guardamos silencio por un buen rato, sin saber que decir, y llegué a la conclusión, de que no hay nada que se me venga a la mente para poder eliminarla de nuestro camino, a menos que un día apareciera en un río muerta, pero es obvio que eso es algo que solamente podría soñar, a menos que la vida me ame y acabe con ella, pues seria incapaz de matarla por mi cuenta.
Jade
Como no le encuentro más sentido a seguir en la habitación de Summer en un incómodo silencio, decido marcharme, pero al tratar de cruzar la puerta de la casa de mi amiga, me topé con un Jason maloliente a alcohol y cigarrillos. Vaya que luce asqueroso, y admito que me destroza en el alma verlo de esa forma. Su boca hace una mueca, y no sé si es un intento de sonrisa, o sólo trato de no llorar con mi presencia. Quizás es un poco de ambas, pero sin duda a mí me hace sentirme mal.
-Jason... Por fin te veo después de días.
-Yo.. Es mejor que hablemos.-Su voz quebrada no me da buena espina.
Asiento con mi cabeza, y escondo mis manos en las mangas de mi enorme suéter viejo que tanto me gusta vestir. Me pide sentarme en las escalinatas de la entrada de su casa, y espero a que después de un suspiro, se decida a hablar, pero para que eso suceda, pasan varios minutos, pues parece estar pensando en las palabras exactas que saldrán de su boca.
-Es mejor que...
-No... Ni siquiera lo pienses. No, no puedo aceptarlo.
-Ni siquiera me has escuchado, Jade... ¿Podrías oír lo que diré primero?
-No, porque sé exactamente lo que dirás.
-¿Y qué es lo que diré?
-¿Lo haces por ella?-Siento como mi voz comienza a romperse, al igual que cada palabra llena de dolor que empieza a salir por mis labios.
-¿Ella?, me confundes... ¿A qué té refieres?
-Jason... Vas a terminar conmigo, ¿no es así?-Él aprieta sus ojos, al igual que sus puños, tratando de reprimir el dolor que le produce escuchar eso.
-Sabes que es lo mejor...
-¿Para quién, Jason?, ¿Para ella?, pues es obvio que ella va a salir beneficiada de todo esto, menos yo... Y estoy segura que tú también. Summer me ha hablado de todo lo que ha hecho, y no mereces una basura como esa.
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Inexplicable
RomanceSu mirada era fría. Era un hielo, buscando un brillo de luz que derritiera su corazón. Sus pómulos eran altos, su sonrisa grande y coqueta, que dentro ocultaba una dentadura perfecta y brillante. Sus hombros eran delicados, pero al mismo tiempo pod...