Damas y caballeros, sean invitados a encender sus motores. Pues tendremos a Michael Schumacher nuevamente en la Fórmula 1. Schumacher Racing se sumará este año, conformando así, uno de los ahora once equipos que competiran para el gran campeonato mu...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
SEPTIEMBRE, 2019 MONZA, ITALIA GRAN PREMIO ITALIANO
Bajé del avión, con mi madre detrás de mi cuerpo en una caminata tranquila. Lance a mi lado, Mick mostrándome un meme a mi otro lado. Michael estaba junto a mi madre, charlando temas de Marketing.
Corinna, la mamá de Mick estaba un poco más atrás, con Tina en una charla que perdí al concentrarme en lo que mi amigo me señalaba desde la pantalla de su celular.
Las cámaras, la prensa y todo a lo que aún no me acostumbraba, nos topó ni bien pusimos un pie dentro del Aeropuerto.
Los días pasaron lentos y rápidos a la vez, los entrenamientos de reflejo cansaban mi vista cada vez más, haciéndo que tenga que usar mis gafas de aumento más seguido.
Finalmente llegó la rueda de prensa del jueves, donde compartiría asiento con Vettel, el alemán de Ferrari y Charlie; quienes estaban juntos en una misma conferencia por el simple hecho de la guerra que se había formado entre ambos este año.
Acompañaba Checo Perez, ese Mexicano sonriente que siempre trataba de enseñarle nuevas palabras a Lance, que por alguna razón siempre que me veía me decía "Wey" y también, por algo que desconozco, eran bastante amigos entre ellos. Checo saldría a la parrilla con una penalizacion vigente debido al motor de Racing Point en la última carrera de Bélgica en Spa.
Gasly, a quién todos buscaban presionar y entrevistar por su salida de Red Bull. Verstappen, el ex compañero de Pierre.
Lewis, el hombre Mercedes que estaba siendo destronado y yo, que estaba peleando con garras y dientes por hacer que eso suceda.
Me coloqué en mi asiento, detrás de mi nombre mientras Pierre me saludaba con un beso en la cabeza, al igual que Charlie para pasar de largo e irse directamente hasta sus lugares. Los entrevistadores y periodistas llenaban el lugar mientras mi vista se centraba en que Pierre me preste un poquito de atención.
—¿Qué le pasa a Charles?— pregunté en un leve susurro al verle la cara al monegasco, sentándome a su lado, en el lugar de Hamilton que aún no había sido ocupado.
—Te doy dos pistas, uno: la chica Argentina. Dos: terminó con Giada justo hoy. Tres: Charlotte le pidió oficializar la relación.— soltó Pierre, haciéndo que mi mirada se pose directamente en la cara de desagrado que tenía Charles.
—Pierre, básicamente me contaste el problema.— dije yo, mirando como él negaba lentamente.
—No es ni el principio, Gale.— volvió a susurrar, dejándome muda ante lo que podría llegar a estar pasando Charles en su vida privada, además del caos y el drama propio del paddock.
