¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Baile de invierno
Arya al volver a casa, su tía se encontraba en la sala leyendo un libro. Pero al saber que su sobrina había llegado dejó de leer cerrando el libro con el separador en la pagina que se quedó.
—¿Me dirás qué pasó con mamá?–preguntó sin rodeos.
—¿Y tú me dirás por qué vienes como si hayas estado jugando adentro de una alcantarilla?–arqueó una de sus cejas. Arya se miró, toda ella tenía suciedad.
—Prometo que te contaré todo, si tú me dices que sucedió con mamá–le dijo Arya enfrente de ella. Margaret suspiró y con un asentimiento se sentó al lado de su tía y le empezó a contar lo qué pasó–. Al principio no le creí a Dustin pero... algo en mi me decía que confiara en él. Lo hice y era verdad, los Demo-dogos existen–terminó de decir. Maggie alzó ambas cejas al escucharla–. Te juro que te digo la verdad. Se que tardarás en creerme. Pero puedes decirle al jefe de policía o a Joyce–Maggie la observó tratando de saber qué ocurría con su sobrina.
—Por favor, dime que no fumaste marihuana–le pidió. Arya negó de inmediato.
—Claro que no, Dios–resopló. Sabía que su tía le era imposible creerle pues hasta ella misma si le dijeran eso diría que solo quieren llamar la atención. Arya tuvo que verlo para creerlo—.¿Me dirás ahora lo de mamá?–le pidió. La mujer esperó unos segundos y entonces le contó.
—Tu mamá era diferente Arya. Nuestros padres no sabían que era lo que tenía incluso la corrieron de la casa, ella tenía un amigo el cual la ayudó después conoció a tu papá cuando visitó Rusia.
>Tus padres no se enamoraron pero cuando naciste, te amaron. Luego las cosas se complicaron, las personas de donde trabaja tu papá se enteraron de tu madre y de ti. Solo le dieron una opción a él, dejarte viva a tu mamá o a ti... pero antes de que él dijera algo mataron a tu mamá–Arya escuchaba atentamente a lo que le contaba su tía sintiendo el nudo formándose en su garganta–. Tu papá fue cuando me localizó y decidió entregarte a mí, para cuidarte. Regresé a Hawkins, le pedí al amigo que era de tu madre que te enseñara ruso para que leyeras las cartas que prometió tu papá enviarte cada mes. A él le dolió dejarte, me hizo prometerle que no te dijera todo esto que te dije. Ahora como sabes soy mala en prometer algunas cosas.
Arya estaba atónita, intentaba procesar cada palabra.
—¿A que te refieres con diferente?–preguntó.
—No lo sé, mis padres me lo ocultaron. Deberías irte a duchar, te prepararé de cenar.
Ella asintió y fue a ducharse pero antes al quitarse su chamarra sintió en un bolsillo algo, supo que eran las gafas de sol que Steve le había prestado cuando fueron al viejo tiradero, las dejó en la cama. Después de bañarse se colocó la pijama. Cenó sin reprochar, Margaret se quedó sorprendida de que su sobrina se haya comido todo lo que le sirvió. Incluso le pidió un poco más.
