Endgame

3

Al otro día en la universidad donde Bin daba clases de fotografía aparecieron mágicamente el resto de sus amigos. Jinwoo, Myungjun y Rocky también eran profesores y se dedicaron a consentirlo.

- Nunca me agradó – habló fuerte un enfadado Myungjun, no le gustaba ver a su bebé con el corazón roto.

- Literal le dijiste que fuera testigo en nuestra boda – lo miró cansado Jinwoo, su prometido era muy dramático a veces.

- Pues que bien que no le hemos puesto fecha porque no quiero verlo.

- No sean así, ustedes quieren a Eunwoo, no ha dejado de ser nuestro amigo – Bin agachó la cabeza. Sus lazos eran importantes y si bien Myungjun y Rocky eran sus amigos desde antes, no quería que odiaran a su ex solo por ser eso, su ex.

- Eres muy bueno por tu propio bien Bin – Rocky tocó su hombro – cualquier cosa me marcas, el estúpido edificio de mi facultad está a la mierda.

Dicho esto todos se despidieron y se fueron a sus respectivos salones, en clases el profesor Moon no pudo ocultar su tristeza, y la tarea que dio hizo que el corazón de sus alumnos diera un vuelco.

- Luego de las técnicas de hoy voy a dejarles una tarea especial. Necesito que tomen fotografías para reconstruir un corazón roto – el aula lo miró extrañado, el joven profesor nunca sonó tan melancólico

- A qué se refiere, profesor? – una joven de cabello morado lo miraba confundida, aunque mas bien eran todos los chicos viéndolo así.

- Quiero ser feliz al ver sus fotos, que me transmitan tanto amor y felicidad como para ser capaces de curar una desilusión. Tienen hasta la clase del viernes, por favor, es importante. Pueden irse.

Un murmullo inundó el lugar, era posible que alguien pateara a ese dios griego? Bin tomó sus cosas rápido, pues tenía una sesión de fotos importante y no podía atrasarse. Llegando a su auto encontró una sorpresa en el asiento del conductor.

- Sanha – una sonrisa se dibujó en su cara

- Bin – le miró con una mueca de satisfacción

- Cómo entraste a mi auto? – le preguntó abriendo la puerta del copiloto, solo una persona podía manejar su camaro además de él y ese era Sanha

- Por qué insistes en acabar con mi halo de misterio?

- Cuando son cosas como esta me suena más a delitos que misterios – lo miró haciendo una cara de sospecha

- Robé tu juego de llaves extra hace un tiempo – confesó sin más haciendo partir el auto rojo.

- QUÉ?

- Ay pensé que sabías, de verdad cómo no notas que extraviaste tus llaves hace tanto – intentaba restarle importancia al hecho de meter las manos en el cajón de la ropa interior de su amigo para conseguir su objetivo

- Estás loco – fue lo único que pudo decirle mientras se ajustaba el cinturón, y sonrió para sus adentros, estaba más que agradecido de este chico.

El camino a la sesión de fotos de Bin fue tranquilo, hablaron cosas triviales y cuando ya no había más qué decir escucharon música, pero tarde o temprano sabían que el tema tendría que hablarse.

- Y Eunwoo te creyó que fuiste por cervezas durante 6 horas? – preguntó tranquilo con la cabeza gacha.

- No, ya había salido él a comprar y estaba ebrio, cuando me confrontó le dije que fui a hacer la cerveza a Alemania – sabía que hacer bromas no iba a funcionar tanto, pero quería hacer sentir cómodo a Bin.
- Él está bien?

- Se ve… intranquilo, por qué? Te estás arrepintiendo?

- No… obvio no, es solo… es complicado – Bin sonaba confundido, tal vez si se arrepentía?

- Si te arrepientes lo entiendo, podemos marcarlo justo debajo de cuando tuviste el pelo rosa, primero te gustaba y luego lloraste días porque quedaste calvo – un golpe en el brazo de Sanha dolió de verdad – auch

- No es lo mismo, no me arrepiento de habernos separado – Bin lo miró y le sonrió, era una sonrisa sincera, una que Sanha extrañaba.

- Y qué debes hacer hoy?

- Es una sesión de fotos para el nuevo modelo de Blopberry – dijo Bin arrugando la nariz, no era su marca favorita para trabajar

- Pensé que no ibas a trabajar más con esos “idiotas cara de culo” – imitó lo que su amigo le había dicho la ultima vez que trabajó con ellos

- No iba a hacerlo, pero es mucho dinero. Ya sabes que no todos podemos ser gamers como tú

- Si, lo sé, mi trabajo es lo mejor – contestó Sanha complacido

- Si se le puede llamar trabajo – Bin pellizcó su mejilla.

- Ya vete, te espero aquí para que vayamos a comer, yo invito

- Ganaste un torneo? – alzó una ceja Bin, junto con una media sonrisa

- Sí, ya vete

Bin besó la mejilla de Sanha y bajó del auto, entró al hermoso jardín botánico donde la sesión se llevaría a cabo, era una sesión tarde y debía preparar la iluminación perfectamente para no saturar con retoques. Llegó a saludar al cliente y lo llevaron a conocer al modelo para que diera su opinión respecto al maquillaje. Cuando llegaron al camerino quiso tirarse desde el pequeño tranque que había cerca de ahí. En la silla negra de modelo estaba escrito el nombre de su ex: Cha Eun Woo.

- Mierda… - fue lo único que soltó antes de tener que saludarlo.