Mrs. (Kinda) Soulmate

III

*Flashback*

–De verdad, Taylor siento que le gustas– Decía Ed mientras guardaba unos libros en mi casillero

–Ed, solo porque soy la mejor de la clase no significa que le guste, además ¿Qué probabilidad habría de eso?– Digo cerrando mi casillero mirándolo con mi ceja elevada

–Es que no solo eres buena, también eres muy guapa y por supuesto que eso lo nota– Decía mientras impartimos camino al salón de clase

–Basta, Ed no quiero seguir hablando del tema porque no queremos que la maestra o alguien inadecuado malinterprete esto– Lo señalo con el dedo mientras acomodo mi cámara en el pupitre y me siento junto a Ed

–Alguien ¿como quien?– Dice con calma

–Alguien del salón o de la comunidad estudiantil– Insisto

–Bien, me voy a calmar, pero estoy seguro de que le gustas y apostaría lo que fuera a que pronto se te insinuara– Dejó al aire

–¿Por qué haría tal cosa?– Digo alzando mi ceja incapaz de creer lo que Ed dice

–Fácil, el semestre está por terminar y puede que no nos de clases– decía levantando los hombros

–Basta, no pasara y punto final– Digo algo fastidiada pero sonriéndole para que sepa que mi enojo no va directamente sobre él sino sólo sobre el tema

–Muy bien, clase– Dice Dianna mientras entra por la puerta y se coloca en su escritorio –Quiero felicitarlos a todos por sus tareas de bodegón de la semana pasada, han sido buenísimos y aunque como ya dije todos los trabajos fueron buenos tuve que escoger solo entre cinco de ustedes para la sorpresa que les contaré enseguida– Dice entusiasmada y aunque estoy al 100 en su clase, Ed no pierde la oportunidad de decir "apostemos" como un susurro; mismo que me hace rodar los ojos –Estos cinco afortunados serán parte de la exposición temporal de aprendices que ofrece un amigo cercano responsable de la exposición en la biblioteca pública de aquí de Nueva York misma que es visitada diariamente por críticos y fotógrafos de renombre que podrían estar buscando jóvenes para pasantías con carácter curricular– Termina, haciendo a todos murmurar de la emoción –Ahora, los selectos prodigios de la fotografía de este semestre son: Ed– Dice mientras todos aplauden –También Isabella, Fernando, Jonah y claro la señorita Taylor– Dice mientras sonríe cómplice escuchando a todos aplaudir –Por favor aprovechen esta increíble oportunidad y saboreen este éxito, porque estoy segura que vendran mas para todos ustedes– Decía sonriente –También quiero que visiten mi oficina más tarde en el orden en que los he mencionado porque es necesario darles indicaciones de como vamos a continuar con la logística– Todos asentimos y tras un silencio de 5 segundos continuó hablando –Como saben el semestre está por concluir y espero estén trabajando en su collage de proyecto final porque será entregado la semana siguiente para decirnos adiós al menos durante el periodo vacacional y bueno... ojala que podamos vernos el semestre siguiente– La sonrisa de esa mujer era muy bella, al igual que el resto de su cara. No quería admitirlo en voz alta porque estaba cansada de las bromas de Ed, pero si, la maestra me parecía muy atractiva. –Muy bien, por hoy no hay nada más, así que si requieren del resto de la clase para continuar con su proyecto pueden retirarse libremente– La mitad del salón partió del salón y aunque Ed y yo estábamos por hacer lo mismo pensé que podría adelantarme con la maestra y averiguar qué necesitaba para la exposición

–Dame un segundo, Ed– El asintió y me esperó paciente en la puerta –Disculpe... señorita Dianna– Dije tímida y sonrojada

–Taylor ¿Qué sucede?– Dice con ese tono que se que es solo para mi

–Bueno yo... solo quiero saber si podemos hablar de la exposición ahora o...– Me interrumpe

–Definitivamente no, tendremos que vernos a la hora acordada– Ahí está esa sonrisa

–Vale, muy bien... entonces nos vemos mas tarde– Le sonrio de lado y me alejo –Por cierto...– Insisto

–Si, si quiero un café. Ya sabes como me gusta– Termina y me sonríe y guiña a la vez haciéndome sonrojar nuevamente

–Muy bien– Digo y me retiro

***

–Taylor, pasa por favor– Dice Dianna mientras me ve asomandome por la puerta de su oficina

–Gracias– Digo cerrando la puerta y sentándome frente a su escritorio

–Bueno Taylor es rápido así que creo que me durará más el café– Se ríe mientras se pone de pie y va a buscar un cuadro al fono de la oficina mismo que pone frente a mi en el escritorio –Como ves es la medida estándar de un cuadro de exposición, pero al ser tu bodegón en toma vertical prefiero que lo adaptes a tu modo sin exceder de la medida estandar ¿ok?– Dice mientras señala el marco desde atrás de mi silla

–Realmente tengo muy claro cómo lo voy a presentar– Digo suficiente, vine aquí lista para no sentirme intimidada

–Eso esta excelente– Oh no, ahí está el tono –Quisiera comentarte que tu cuadro fue mi favorito– Dice mientras pasea por la oficina –Eres muy buena en esto, Tay– ¿Por qué de pronto estoy tan nerviosa?

–Gracias, señorita– Digo trabada

–Vamos, Tay te he dicho que fuera del horario escolar tu y yo podemos hablarnos de tu. A lo mucho seré 5 años mayor que tu– Dice mientras se sienta en su silla finalmente, pero no se si me gusta o no. Ahora viendo sus ojos fijamente me han empezado a sudar las manos

–Aun no me acostumbro, Dianna... perdón– Digo aun sintiéndome extraña

–Además de buena en la foto eres educada y muy guapa... todo un partido para los chicos– Dice al aire y se inclina en el escritorio

–Oh no, yo no...– Trastabilló al hablar –Yo no tengo novio y nunca lo tendré– Digo con un nudo en la garganta –Digamos que los chicos no son lo mio– Río con nervios

–¿Pactos célibes?– Dice risueña mientras se abren mis ojos

–Oh no– Reitero

–En eso nos parecemos; los chicos tampoco me van– Dice mientras se pone de pie nuevamente –Tengo gustos mucho más interesantes–Mientras habla yo no quiero voltear porque ahora mis manos están tratando de calmar mi ansiedad jugando con la tela de mi blusa –Digamos que me parecen más interesantes las chicas rubias– Suelta y de pronto la saliva de mi boca se atora en mi garganta –Sí, con ojos azules y si son buenas en la fotografía... dios estoy perdida– Afirma casi al borde de mis oídos

–Yo...– Digo incapaz de hablar más

–Sí, así como tu– Dice firme y yo pierdo el aire –Una lastima que tenga que jugarle a la maestra contigo...– Dice volviendo a su tono serio que usa con todos y colocándose nuevamente en su asiento

–No se que...–

–Oh, tranquila chiquita puedo esperar cuatro años– Dice mientras me guiña un ojo yes entonces que mi voz sale ahogada

–En realidad– Digo tomando todo el valor que me había tragado hace un par de segundos –No sé por qué deberías esperar tanto...– Digo parandome de mi asiento y caminando lentamente a su asiento –Tenemos gustos muy parecidos. Las mujeres cinco años mayores que yo, rubias y ojiverdes me parecen tan...– suspiro cerca de su rostro –Atractivas– Digo mientras estiro mi brazo y tomo el marco del escritorio. Seguido de eso la veo cerrar los ojos y digo –Y si se llaman Dianna son todavía más ardientes– Culminó y me apartó hasta llegar a la puerta –Esta ha sido una gran charla, señorita Agron– digo risueña viéndola abrir los ojos frustrada –Nos veremos por ahí– Le guiño un ojo y me aparto cerrando la puerta detrás de mí

*Fin FlashBack*

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Perdón por la tardanza