La Dolce Vita III (NCT Dream)

4.- Monstruación

 Jeno tenía un problema, no solo ese dónde tenía que sentarse en la taza del baño y tocar partes que no había tocado en otras personas, mucho menos en él mismo. Se sorprendió cuando el papel estaba manchado de rojo. No había que ser un genio para saber que se trataba de sangre.

Solía escuchar que su hermana mayor se quejaba de eso, que era algo normal entre mujeres, que aparecía cada mes y se iba después de 3 a 6 días dependiendo de la persona.

Ahora lo que necesitaba era tomarse una pastilla, conseguir toallas sanitarias y probablemente ropa de su talla, el plan sería salir, comprarlo y volver, era una mujer, nadie lo reconocería, tampoco podían decirles a los managers.

¿Qué debía hacer? ¿Y si le decía a Doyoung? Él siempre sabía qué hacer... Pero probablemente Haechan y Mark no querían, porque sabían que Kim le contaría a Taeyong y Taeyong le diría a Johnny y se haría una cadena que involucraría a todo NCT 127.

Jeno suspiró y puso un buen pedazo de papel en su ropa interior. Eran unos bóxer que se habían llenado de sangre, debía cambiarlos. ¡Una horrible pesadilla!

Cuando salió del baño la segunda vez, ya con una trusa ajustada que impidiera que se moviera la ropa interior; vio que sus seis compañeros, estaban sentados en círculo en la sala.

—¿Por qué nosotros? —Preguntó Mark con un tono triste.

—Es correcto, eligió a los más feos como mujeres. —Haechan miró a Jaemin. —Excepto tú. Si hubiera sido a los más lindos seríamos Renjun y yo en vez de Jeno y Mark.

—Sí, pero no estamos hablando de ti. —Mark cruzó los brazos.

—Lo sé, pero sería mejor si se tratara de mí. —Donghyuck rodó los ojos. —Al menos así sabríamos por qué nos hicieron brujería a los más lindos. ¿Ustedes qué tienen en común? ¿Cuál es el patrón de amanecer así?

—Los más fuertes. —Dijo Jisung de repente. —Se convirtieron en mujeres los más fuertes.

—No tiene sentido. —Renjun pensó. —¿Pero por qué? O más bien ¿Cómo?

Y es que no tenía nadita de sentido lo que estaban viendo sus ojos, ¿Cómo podía modificarse la estructura ósea, la anatomía e incluso el cabello en una sola noche? ¡Ese tipo de cosas no pasaba en la vida real!

—¿Pero por qué nosotros? —Jaemin no entendía. —Para qué quitar a los más fuertes. No ha salido en medios que Haechan y yo nos recuperamos, nadie debería saber que estábamos bien.

Cuando Jaemin habló, un dolor agudo atacó a Jeno, en su vientre una especie de retortijón, patada, dolor, quería salir dentro de él, solo quería echarse en cama y llorar un rato. Necesitaba hablarle a su hermana y preguntar qué era lo que normalmente compraba para esas situaciones.

—Jeno ¿Estás bien? —le preguntó Mark a su capitán.

—No. —Jeno llevó sus manos a su abdomen y se dobló por dolor.

—¿Cólicos? —Preguntó Haechan. —Mi hermana y mi mamá sufrían al mismo tiempo. Es un estrés horrible. ¿Estás sangrando?

—Sí. —Jeno se recortó en el sillón.

—¿Qué debemos hacer? —preguntó Renjun. —¿Voy a una farmacia?

—Yo quiero ir también. —Jaemin dijo.

—No, no sería conveniente que ustedes salgan, yo iré. —Dijo Haechan.

—A ti todos te conocen, si te ven en la calle obviamente te seguirán. —Chenle le regañó. —Yo pienso que Jaemin y Renjun deberían de ir, y también deberían de ir a comprar ropa, puedo ver que Jeno tiene la bandera de Japón en su trasero.