Planes Malignos 2 (Dr.Robotnik x Lector/a)

23. Lo Inesperado (3)

Advertencia: +18

Pasó el tiempo que pasabas en casa de Robotnik, habías comenzado a relajarte un poco más acostumbrándote a todo lo que sucedía en un día. Bueno, al menos casi todo. Se escucharían algunas explosiones en el laboratorio de abajo y Robotnik le gritaría a lo que asumiste que era su invento o el Agente Stone.

Estabas encantada de que no te hubiera levantado la voz en algún tiempo. Ahora que lo piensas, no te había hablado tan duramente como solía hacerlo desde que te besó la frente después de tu "cita". La idea te dejó aturdido por un momento antes de que Stone moviera su mano frente a ti para captar tu atención.

- Oh, perdón por eso. ¿Sucede algo? -.Te sonrojaste un poco sintiéndote un poco avergonzado de que te tomaran con la guardia baja de esa manera.

-El Doctor quiere que salga a recoger algunas cosas. ¿Necesitas algo?

-No, gracias.

Stone asintió y se alejó. Lo viste mientras cerraba la puerta detrás de él antes de escuchar otro grito desde abajo. Apoyas la cabeza hacia las escaleras y ves a Robotnik volver de su laboratorio subiéndose las mangas de la camisa hasta los codos. Al pasar junto a ti, olía un poco a humo y solo había un poco de hollín negro alrededor de sus ojos, lo que brindaba una vista perfecta de dónde se colocaban las gafas en su rostro.

-¿Todo bien, doctor?

No hubo una respuesta por un momento mientras lo seguías a la cocina. Se sirvió un vaso de agua y se lo bebió antes de lavarse la cara y secarlo con un paño que colgaba de un perchero en la pared.

-Simplemente color de rosa, agente T/N -.Respondió irritado.

No querías probar tu suerte y molestarlo, pero querías asegurarte de que estaba absolutamente bien. Justo cuando ibas a tocar su hombro, él se dio la vuelta para agarrar tu muñeca. Te hizo saltar pero no te alejaste. Sus ojos recorrieron tu rostro antes de que pudieras darte cuenta de que estaba mirando tus labios. Con un movimiento suave, se inclinó y presionó sus labios contra los tuyos, su bigote te daba suaves cosquillas en la nariz. No sabías qué hacer. ¿Adónde deben ir tus manos? ¿Deberías devolverle el beso? ¿Estaba delirando? Tu corazón había comenzado a latir tan rápido que te sentías un poco mareado.

Robotnik se apartó unos centímetros para susurrarte.

-Nada está bien.. ¿Quieres saber por qué?

Asintió vacilante y esperó la respuesta.

-Porque eres una distracción, T/N. Te estás burlando de ese cuerpo tuyo. Tus labios carnosos y tu mirada seductora. Esas caderas anchas que solo quiero agarrar y lastimar. Ese cuello delicado que quiero morder..-.Gruñó poniéndose a centímetros de tu cuello. -No puedo concentrarme en mi trabajo mientras pienso en lo mucho que te deseo...

Tu aliento se atascó en tu garganta y sentiste que no podías respirar. Sus ojos color avellana te miraban como un depredador que ha atrapado a su presa. Ser atrapado en su mirada viciosa hizo que tus rodillas se doblaran. Por suerte, su brazo te envolvió con rapidez para atraparte y mantenerte cerca de él.

-¿Ya te estás enamorando de mí?

Sus palabras tenían un poco de descaro cuando las comisuras de sus labios se torcieron hacia arriba.

Sin un solo pensamiento, fuiste arrastrado y llevado de regreso a su habitación. No te opusiste. ¿Por qué no objetaste? Tu mente corrió tratando de encontrar la mejor razón para no acostarte con tu jefe, pero no pudiste dar una buena razón. Fantaseabas con eso. Soñaste con eso. Solo la idea de tener esas manos encallecidas en tu cuerpo examinando cada parte de ti te hizo retorcerte y tu estómago se revolvió. Realmente querías esto, probablemente más que nada.