Te Ayudo A Olvidar (Mo Xuanyu X Lan Wangji)

Un Pasado Nostálgico

La cena es tranquila, sólo con algunas palabras intercambiadas entre los tres mientras no tuvieran nada en la boca. Y en esos momentos, Xuanyu agradecía no haber perdido del todo la etiqueta que le enseñaron en la Torre Carpa.

Aún así, se removía incómodo, sintiendo su espalda baja doler mientras seguía arrodillado en el suelo tratando comer tranquilo. Se esforzó en seguir sonriendo a Sizhui, no queriendo levantar sospechas acerca de lo que en verdad hizo con Wangji. Y por suerte, el menor no pareció notar nada fuera de lugar.

Lan Zhan, en cambio, logró ver la respiración del Mo era ligeramente más rápida, como si ocultara algo. También sus hombros temblaban un poco, y encorvaba la espalda.

Y el conejo comiendo lechuga en una esquina bajó las orejas, igual que si frunciera el ceño. El Mo no podía culparlo de estar molesto. Mientras intimó con Wangji, olvidó su amiguito seguía dentro y seguro presenció todo, quizás hasta intentó salir...

Tan pronto los tres terminaron de cenar, Wangji recogió rápidamente los platos, y clavó sus ojos claros en su hijo.

—A dormir– Ordenó.

—Pero aún no tengo sueño– Negó Sizhui, curioso– ¿Van a hablar sobre el hombre de la mañana? Puedo escuchar también.

Xuanyu no sabía si estar feliz del entusiasmo que mostraba el Lan menor, o maldecir internamente. Incapaz soportar estar sentado en el suelo por más tiempo, se colocó de pie diciendo severo:

—Ese sujeto es peligroso. Será mejor regreses a Gusu.

—Pero si vino por tí, yo podría ayudar a protegerlo– Sizhui pareció muy convencido de su propia lógica, sin imaginar realmente a qué clase de persona se refiería el Mo– ¿Sabes quién es?

Xuanyu quiso abrazarlo entre lágrimas, recordando la amenaza de Xue Yang, y suplicarle regresara a salvo. Aunque dudaba ése lunático fuera a volver hasta saber se encontró con la mujer capaz reparar el alma de una persona, no deseaba exponer al Lan menor.

—No puedo decirlo– Emitió, impotente.

—¿Por qué?

—El insecto Gu no me permite– Respondió, bajando la voz apesadumbrado.

—Pero, ¿Eso no es una medida que Lanling usa para que no se revele información confidencial? ¿El sujeto tiene que ver con su hermano?– Insistió sorprendido Sizhui.

Las pupilas de Xuanyu se contrajeron, e inclinó la cabeza, reflexionando en silencio. Desde que recordaba, su hermano Yao lo trató con el mismo cariño fraternal siempre esperado de Jin Guanshang, e incluso había aceptado su peculiar gusto en hombres sin discriminación.

Era imposible quisiera hacerle daño. Y en el remoto caso fuera verdad, preferiría llevar un cuchillo a su cuello.

Wangji supo no era buena idea siguiera la conversación por ese lado al notar el rostro del Mo oscurecerse. Usó su mano libre de la vajilla para acariciar con el dorso la mejila derecha ajena, obteniendo una mirada sonrojada.

—Mi hermano debe saber qué hacer– Sugirió el oji dorado, intentando soltar un consuelo–  Hay artefactos.

—¡Y debe haber alguna laguna en el hechizo!– Concordó el Mo. Su hermano jamás planearía nada en su contra, entonces sólo tendría que seguir investigando y llegar a encontrar al verdadero culpable.

Sizhui ya no insistió, repentinamente inexpresivo.

—Entonces, ¿Volveremos ya a casa?

Sintiéndose responsable, el Mo colocó una mano sobre la nuca del Lan menor, agachándose levemente a su altura.