❛❛APOCALYPSE. oblivion❜❜ [tua]³

01

.: ZERO :.

meet the sparrows

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Lyra creyó que, finalmente, tendría su final feliz.

Creyó que, al haber sobrevivido a Bill, La Comisión y La Encargada, que al haber aceptado su poder con la decisión de nunca hacer daño a su familia y que ellos le prometieran su cariño y compañía, todo estaría bien. Creyó lo mismo cuando, apenas cinco minutos atrás, el maletín mágico los hizo aterrizar en el vestíbulo de la mansión, tomados de las manos, Klaus susurrando te amo en sus labios...

Creyó que ese sería su final feliz.

Hasta que su padre apareció ahí, vivo, y dijo:

–Esta no es su casa.

Esas palabras cayeron como un balde de agua fría. No, más bien como un bloque de concreto duro que oprimía contra ellos hasta convertirlos en esas imágenes de caricatura, como si sus cuerpos quedarán convertidos en nada más que estampillas mal dibujadas que debían ser despegadas del suelo con una espátula.

Lyra se sintió así al ver su reflejo en el monoculo de su padre, sir Reginald Hargreeves, mientras esas esperanzas parecían desvanecerse en el silencio sepulcral que había invadido la sala. Se sintió muy pequeña, y por lo tanto todo lo demás creció. El latido de su corazón retumbó dentro de ella –aunque, probablemente, también se debía al efecto de su conexión con Vanya–, mientras los muebles y muros de esa casa que su padre decía no era la suya, parecían cernirse sobre ella como si en verdad quisieran sepultarla y machacarla hasta volverla un microscópico grano de arena.

Con un escalofrío que reactivó todos sus impulsos y sentidos, Lyra parpadeó, solo para encontrarse de pie en la sala de estar de la academia, su casa, dónde todo era del tamaño correcto y no una pesadilla que parecía creada por La Habitación Blanca. Incluso se descubrió apretando la mano de Klaus con más fuerza a través del guante y a él correspondiendole el gesto.

Afortunadamente, a diferencia de ella y los demás, Allison siempre era la más rápida en encontrar su voz.

–¿De qué hablas? –preguntó con el ceño fruncido, como queriendo mostrar entereza, pero el miedo se colaba en su voz–. Esta es la Umbrella Academy.

Una especie de sonrisa destelló en las comisuras de los labios de su padre.

–Academia equivocada –replicó, burlándose. Luego, alzó la mirada hacia el rellano del segundo piso–. Esta es la Sparrow Academy.

Lyra y sus hermanos dieron media vuelta, siguiendo su mirada cuando escucharon los pasos acercándose, como una coreografía para una obra musical que llevaban mucho tiempo ensayando. Su padre daba una señal y esas personas aparecían en perfecta alineación, mirándolos desde arriba, haciéndola sentir aún más pequeña. Contó cinco personas usando uniformes similares, con sacos color guinda y los escudos del lado del corazón, custodiados por una especie de cubo verde brillante que no podía ser una lámpara, porque se movía con ellos. Ellos, la Sparrow Academy.