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Recuerdo que le hablé de él a mi mejor amiga de ese entonces, le tomé cariño en poco tiempo, a mi amiga le agradaba, creo que cualquiera que me escuchara hablar de él, diría: "¡Oh! Es un buen chico, supongo." y eso que sólo era el primer día.

Pasamos todo el día hablando, él hacía su tarea de trigonometría y yo de inglés, no sé él, pero al menos yo, no me podía concentrar. Es decir, no significa que me gustara al primer día, sólo se pasaba el tiempo hablando con él que ni siquiera recordaba que tenía un cuaderno con un lapicero frente a mí, además, mi tarea era muy aburrida, ¡veo el verbo to be todos los años!

Al día siguiente era mi primer día de clases presenciales, tenía mucho miedo, pero él me ayudó a preparar todo, ya era de noche.

—Recuerda, puedes descargar juegos sin internet para no aburrirte, ten confianza, lleva lo necesario y duerme temprano; Si quieres quédate en el celular, pero de las 11PM no pases. Si necesitas algo, recargas datos y me escribes. —Dijo él cuando estuve a punto de dormir.

—Está bien, buenas noches. —Dije.

Siendo sincera, no le hice caso, me quedé un rato más en el celular, al día siguiente, llegué tarde, pero aprecio su esfuerzo en ayudarme, se me hizo un... lindo gesto.

El día siguiente, o sea, mi primer día, fue asqueroso, me fue mal en todos los sentidos, pero, ¿saben algo? No me importó, porque cuando llegué a casa, hablé con él, me hizo olvidar de todo, nada estaba mal si hablaba con él. Hablábamos de trigonometría un rato, sí, no entendía nada, pero era lindo escucharlo hablar de lo que le gusta, era una linda sensación, no importa si yo no entendía el tema.

Bien, habían pasado dos días y le tomé cariño al chico, no lo conocía muy bien, pero con certeza podía decir que era muy agradable, me gustaban las cualidades que había mostrado hasta el momento, me hacía reír, me hacía olvidar, me ayudaba con todo, me divertía mucho, yo ya imaginaba un día templado donde ambos estuviéramos en un parque escuchando música juntos, ¡teníamos los mismos gustos musicales!, ¿acaso podía pedir más?

Este chico era mi amigo ideal.

Ya era el tercer día. Ok, nunca he tenido buena relación con mi mamá, ella siempre fue muy cruel conmigo, sólo pensaba en sí misma, siempre ha sido así desde que soy muy pequeña, más aún porque en 2021 mi vida académica iba por los infiernos. Ese día olvidé conectarme a una clase virtual, por lo que ella me gritó, peleamos demasiado fuerte, recuerdo que ese día casi me pega y me quitó el celular.

Me encerré en el baño a llorar, estaba cansada de que todo con ella siempre fueran peleas todos los días por razones tan estúpidas, además de quitarme lo único que me hacía feliz que era mi celular.

Lloré cómo por tres horas, me corté, grité, incluso intenté suicidarme ese día, pastillas de acetaminofén y tijeras eran suficiente, tenía demasiados problemas en ese momento cómo para aguantarme una pelea con esa señora, a cualquiera se le olvida una clase virtual de artística.

Tenía una pastilla en la mano, pero de la nada pensé en él. Si bien teníamos tres días de ser amigos, no sé cómo es que pensé: "Hey, no todo está perdido, lo tengo a él, ¿cómo voy a morir en este momento si está él?", así que intenté calmarme e imaginar que él estaba a mi lado calmandome, sin duda funcionó, me apoyé en la pared cómo si ese fuera su hombro y me relajé, después salí del baño, fui por el computador y le escribí por tik tok a avisarle que me castigaron, en mi defensa, no tenía su Instagram.

Intento de suicidio del cual me salvó #1.

Sam y Mariana: Una mala historia de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora