CAPITULO XIV : BENEDICT + ISABELLA

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Tus ojos susurraban: ¿nos conocemos?
Al otro lado de la habitación, tu silueta
Comienza a acercarse ( ...)

Y fue
Encantador conocerte
Todo lo que puedo decir es que
Estaba encantada de conocerte

La insana obsesión que sentía Benedict por Isabella seria su perdición. Por su piel . Por aquellos gemidos que emitía como canto de sirena. Por sus labios que no le daban tregua alguna y por aquellos ojos que estaba seguro que se vivía mil vidas iban a seguir desarmándolo de la misma manera.

Sus manos eran su lenguaje mas intimo y personal , a estas alturas la ropa solo estorbaba , dejándola como un camino olvidado en algún lugar de la habitación. El la tomo por la cintura sentándola sobre el sin dejar de verla a los ojos fijamente . Ella le sonrió , devorando sus labios en el beso mas abrazador que ni siquiera en sus sueños mas locos había vivido. El joven acaricio su espalda baja , llegando a su muslos dejando una estela de fuego en cada caricia .

-Te extrañe tanto - le susurro ella besando el lóbulo de su oído .

- No te dejare ir , te lo dije , me has arruinado , debes hacerte cargo .

Se tomaron su tiempo para explorar y venerar sus cuerpos , el venerando su pecho como un ciego al sol. Ella besando cada parte de su cuerpo , queriendo reclamar lo que tanto había añorado. Isabella acaricio suavemente la parte mas intima de su cuerpo , observándolo, mientras masajeaba sin dejar de verlo , perdida en las sensaciones y en los jadeos que se filtraban de la boca del joven.

- Entonces ... somos dos personas en ruinas.

Benedict le sonrió arrebatadoramente con ojos verdes brillantes de deseo y lascivia , callando los jadeos de su mujer con un beso posesivo . Territorial. La tomo de la cadera y se impulso dentro de ella. Casi sintiendo un canto celestial cuando estuvieron unidos de esa manera.La joven de ojos pardos lo abrazo fuertemente , acabando con cualquier distancia entre ellos , mientras subía y bajaba sobre el , a un ritmo tan suyo , siempre tan perfecto el uno para el otro.

-Dilo - dijo entre jadeos el mayor levantando el mentón de la mas joven.

-AH... Amor - le respondió perdida tomando todas sus fuerzas para poder hablar coherentemente - Solo tu ...

Volvió a sonreír , besándola con todo lo que tenia y absorbiendo aquel grito casi desgarrador que emitió su garganta. Lo beso sin importarle respirar mientras el se derrumbaba encima de ella , casi refugiándose en su pecho mientras los dos recuperaban el sentido , las respiraciones y las palabras. Acariciaba su sus brazos , dibujando trazos abstractos en su camino, observando la piel que tanto había extrañado , se detuvo en sus tatuajes y en uno nuevo en particular , cerca a su muñeca , lo trazo con la yema de sus dedos, dándose cuenta también de la mediana cicatriz que se encontraba en su muslo derecho.

- Bonito tatuaje - rompió el silencio.

Ella asintió sonriendo pero pudo notar una cortina de tristeza en sus ojos.

- Es como aquella obra que vimos juntos en Grecia.

No dijo nada , solo siguió acariciando su cabello y observando al cielo raso.

ENCHANTED || Benedict BridgertonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora