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Ken llegó a la casa y escuchó unos ruidos a penas abrió la puerta, le extrañaba ya que aquellas voces le parecían conocidas. Terminó dando con el lugar del cual provenían esos gritos y ahí vió a Pol y a Big discutiendo, con Arm y Pete deteniéndolos para evitar que se fueran a los golpes.

Big se miraba realmente molesto, los subordinados nunca se metían entre ellos, no tenían una relación de amigos pero siempre evitaban las discusiones y cada quien estaba en su mundo.
Los cuatro chicos voltearon a verlo y juro que se sintió juzgado, casi logrando intimidarlo.
Big se zafó del agarre de Pete y lo primero que hizo fue golpear a Pol provocando que su labio sangrara y tirándolo al suelo.

Es la última vez que dices algo como eso, que te quede claro. - Advirtió Big.

Big salió de ahí tomando de la muñeca a Ken para que lo siguiera, éste último solo hizo caso sin protestar, no entendía nada.



¿Puedo saber qué pasó? - preguntó Ken una vez que estaban alejados de ahí.

¿Estás bien? ¿Te están molestando? - volvió a preguntar, el mayor negó.

Estoy bien, no te preocupes. - respondió.

¿Puedo saber por qué lo golpeaste? - Big asintió.

Él dijo cosas de ti, es todo.

¿Qué fue lo que dijo? No es la primera vez que hablan de nosotros, no tienes que preocuparte.

No lo entiendes, el imbecil de Pol dijo que tú eras quien estaba infiltrado. - la sangre del menor se heló.

Y ahora quiere convencer a los demás que es así, incluyendome a mí. Pero eso no va a pasar, no sé quien se cree ese idiota. - Ken solamente se quedó callado.

Me molesta que todos aquí te quieran ver como una mala persona, como si ellos te conocieran. Conmigo es diferente, quiero que sepas que confío en ti. - Ken sintió culpa, verdadera culpa.

No te preocupes por los demás, está bien. Pueden decir lo que quieran. - dijo acercándose a él y quitando unos cabellos que habían en su cara.

Kim me pidió trabajar algo con él hoy, me temo que nos quedaremos sin nuestra cita. - comentó el mayor desanimado.

Es una lastima, pero está bien. Trabajo es trabajo. - le sonrió.

Cuando tengamos tiempo, te aseguró que será una buena cita. Incluso trataré de llevarte a un lugar bonito. - habló Big con ilusión.

Entonces voy a esperar.

Big sonrió y lo abrazó fuertemente, escondiendo su cara en el pecho del menor, Ken correspondió al abrazo y solo le hizo caricias en la nuca. El mayor rió por las cosquillas que eso le provocó.

Te quiero. - dijo el mayor de la nada.

Yo también. - respondió él.

Quería llorar, se sentía tan culpable en estos momentos y no sabía como iba a solucionar las cosas, sinceramente, ya no tenía solución. Su vida no le importaba, todo lo que quería era que el mayor estuviese bien pero cada vez arruinaba más las cosas.
Lo siguió abrazando sin decir nada, llorando en silencio. Aún sabiendo que todo era consecuencia de sus actos.

















Es una capítulo muy cortito pero es para no alargar tanto la historia, y también para mostrar como se va desarrollando todo.

Quererte no es tan malo - BigKen.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora