Scars › 𝐂𝐡𝐚𝐧𝐦𝐢𝐧 / 𝐂𝐡𝐚𝐧𝐒𝐞𝐮𝐧𝐠

dix-neuf

En la etiqueta Real, siempre se ha presentado a la cabeza de la familia antes que a los demás al entrar a cualquier lugar. 

En la etiqueta Real, no es otro que el esposo quien lidera.

En la etiqueta Real, incluso si el título pertenece al doncel y no a su cónyuge, jamás se presentaría antes al doncel.

Christopher Van Christark no sólo había roto la etiqueta Real, si no que lo había hecho en el mismísimo Palacio Real, frente a toda la alta aristocracia, un evento inédito donde daba a entender que quien realmente tenía el poder en la casa, era Seungmin Cristark.

O al menos eso significaría en una narrativa común, en este caso...

"Seungmin Christark es lo más valioso del Ducado, no se atrevan a desestimarlo."

El mensaje era claro, cualquier persona que se atreviera a meterse con él enfrentaría la ira del Duque maldito.

Al menos eso le explicó, en pocas palabras, Lord Seortell. 

— ¿Realmente hizo eso...? —girando sobre sus talones, fue imposible que Seungmin despegara la vista de su esposo. ¿No estaban "peleados"? Desde el incidente no habían hablado...

— ¡Síii, y en el mejor escenario posible! Dios mío, quién diría que es un galán —chillaba Changbin a su lado, con una sonrisita mientras tironeaba el brazo del menor, balanceándose con él. 

— ¿Galán? —rió bajito, negando un poco y dejándose llevar por Seortell.

— ¡Vamos a beber! Esto es un banquete ~

Ni siquiera pudo resistirse, Changbin era, como siempre, un torbellino de energía, pero Seungmin no podía dejar de preguntarse, ¿Por qué Christopher había actuado así? ¿Cómo se supone que tomara sus acciones?

Ni siquiera su tercer vaso de champán le ayudaba a llegar a una respuesta, sintiendo el mareo afectar su sistema. 

—Eeeh, ¿Eres bueno bebiendo, Seungmin? —preguntó Changbin, observando las copas a un lado del chico, vacías. 

Una simple mirada bastó para que tuviera su respuesta, pero incluso con eso, Seungmin hipó. 

"Mierda, mierda, mierda". 

Si Christopher veía que había emborrachado a su chico, Changbin estaba seguro que lo regañaría, por lo que pronto dejó de lado su propia copa, tomando por los hombros al menor para dirigirse a un balcón, excusándose conque el consorte de Christark requería tomar algo de aire. 

—Quédate aquí, ¿sí? Voy a traer algo de comida para que se te baje el alcohol, no te muevas —fue bastante efusivo al salir, cerrando las cortinas que daban al ventanal de aquel balcón. 

E inevitablemente Seungmin sonrió, negando. 

¿No era normal que el alcohol le afectara rápido? Siempre había sido así, aunque antes era peor. Ganando un poco de peso, podía tomarse esa cantidad de copas sin terminar desmayado, así que podía darse el placer de deleitarse con la vista. 

Los rayos de sol que daban en ese balcón eran ideales, por lo que apoyando sus brazos contra el barandal, se permitió apreciar el verde jardín frente a él, perfectamente cuidado y cortado, con colores que en ese momento se veían tan vívidos. 

No le importaba ser incapaz de saber si lo que había plantado a unos metros eran claveles o tulipanes, no. Lo único que le importaba era, en su reducida visión, poder entender el por qué del accionar de Christopher.