Seth.
Ha pasado una jodida semana desde que Hell y Aisha fueron secuestradas. No hemos parado desde entonces de rastrear el dispositivo que el padre de Hell incrustó en su cuerpo cuando era una niña. La mafiosa desconoce de esa información porque fue una de las pocas veces que había perdido el conocimiento cuando estaba siendo entrenada por Maksim.
El cansancio pesa en algunos de los hombres, pero no voy a parar hasta dar con ellas.
—General, la Sede de la CMFE de Rusia ha mandado los archivos de sobre la Bratva y sus posibles conexiones con La Strixx —me informa Davet.
— ¿Y qué esperas para ponerlo sobre mi jodida mano? —Increpo con sorna.
Escucho el resoplar a Lacey y el gruñido de Mason desde la sala. Cuando mi hermano hace ese sonido, presagia malas noticias. Me pongo de pie y me dirijo a donde están trabajando mis hermanos junto a los hombres de Hell.
—Tienes que ver esto, monstruo —espeta Mason, con una clara advertencia que lo que va a mostrarme me va a hacer enfadar.
Gira el ordenador y cierro los puños con furia cuando veo un vídeo donde tienen a mi Valkyria atada como un puto animal. La sonrisa burlona de uno de los bastardos enfermos de la organización se muestra al principio.
La sangre me hierve. Quiero destazarlo como el cerdo asqueroso que es y bañarme con su sangre.
— ¿Quieres verlo? —Pregunta Lacey con duda.
Su pregunta tan estúpida me hace mirarla con odio. Mi humor solo ha pasado de horrible a mucho peor.
—Largo. Esto lo voy a ver solo. —No pienso enseñarles el cuerpo de mi mujer mientras es torturada. Que me corten los huevos si lo hago. Nadie se va a burlar o hacer cualquier comentario de ella—. ¡Que se larguen de una puta vez! —rujo.
La única que no obedece es Paige. Sus ojos me miran con furia y nos enfrentamos. A ella le importa una mierda si soy o no el jefe. Ella ha hecho lo que desea dentro de la dinastía. La veo ponerse de pie y caminar hasta donde estoy.
—Que sea la última jodida vez que me alzas la maldita voz, monstruo —réplica. Saca un cuchillo y lo clava en mi muslo—. Puedes ser nuestro Boss, pero jamás te voy a permitir que me levantes la voz. ¿Entendiste?
Dejo que toda la rabia salga y la tomo por el cuello.
—Ya va siendo hora que me respeten porque lo quieran o no soy el Amo y jefe de todos. Si no les parece pueden intentar derrocarme —anuncio para todos. Paige sonríe con diversión mientras la sigo estrangulando. Me enfoco en ella para sincerarme—. Puede ser que para muchos sea un perro traidor, pero me importa un carajo. No voy a cambiar por nadie solo para seguir reglas pendejas. El único me importa soy yo mismo y todas mis egoístas decisiones y estrategias para obtener poder. Lo que quiero en estos jodidos momentos es traer a Hell junto a Aisha con vida —le digo a ella.
Mi hermana hace un movimiento para librarse, pero esta vez la someto ante mi voluntad dejándome caer sobre el piso y la aplasto contra mi cuerpo. No le voy a dar una ventaja para que me ataque.
Una pequeña parte de mi confía en ellos porque en vez de meterme una bala en la cabeza no lo hicieron porque sigo siendo su hermano a pesar de ser un traidor para el mundo de la mafia, pero la parte estratega, sanguinaria y oscura sabe que no debe confiar ni en su propia sombra. Tengo que averiguar hasta dónde diablos esta su lealtad porque si descubro que es una puta trampa no voy a dudar en matarlos aunque sean mi sangre.
—Esa mujer te tiene agarrado por los dos testículos, hermano. Creo que no solo voy a arriesgar mi vida y masacrar a unos cuantos hijos de puta por recuperarla sino que voy a tener que doblegarme ante ella y pedirle que me diga cómo es que fue que hizo para hacer que el hermano que ha jurado no volver a su antiguo puesto como Boss regresara. —Paige intenta librarse por segunda vez, pero empleo más fuerza para someterla. Patalea y hace varios patéticos intentos por librarse, pero sigo siendo más fuerte. Le escucho maldecir y después de darse cuenta que no va a funcionar nada de lo que haga. Deja de pelear—. Me rindo ante el poder del monstruo de la dinastía Sallow.
ESTÁS LEYENDO
DEPRAVITY ||TABOO #1||
Roman d'amourADVERTENCIA DE CONTENIDO +21 «El mundo arderá y mis enemigos se postraran a mis pies cuando mi venganza comience» En el mundo de la mafia liderado por hombres despiadados, Hell Mussollini deberá demostrar porque su nombre es sinónimo de poder y crue...