CAPÍTULO XIII. DEADL DANCE

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Hell.

El helicóptero aterriza en la parte trasera de la villa. No me importa que Seth se quede arreglando la mierda que he desatado. Puede que el sexo con él sea alucinante y pervertido, pero no deja de ser mi enemigo aunque se empeñe a decir que le pertenezco.

Hell Mussollini no le pertenece a nadie, salvo a sí misma.Si ellos quieren creer semejante estupidez, pues es su problema.

—Mi señora, tenemos que hablar de un asunto importante —espeto Markos con seriedad.

Las hélices siguen batiéndose hasta detenerse. Lo miro de arriba abajo esperando descifrar que jodidos sucedió mientras estaba en la entrega de los Schulz.Bajo sin esperar a mis hombres.

—Habla —ordeno. Markos me tiende la carpeta que lleva en la mano y se la arrebato. Hojeo los papeles que se encuentran dentro. Varias fotografías de mujeres y de unos pocos hombres conforman la información—. ¿Qué es esto?

Una foto llama mi atención. Se trata de Arman Yezhov, uno de los miembros más importantes de la Bratva. Tiene marcas de tortura antes de que fuera desmembrado parte por parte, pero en el torso lleva una marca... la mía.

Levanto la mirada llena furia al saber que un bastardo está utilizando mi sello.

— ¡¿Por qué putas tiene mi marca?! —gruño.

Vittorio llega junto a mí y me arrebata la carpeta con toda la información.

—De eso es lo que quiero hablar. La Bratva ha declarado la krovavaya voyna¹ a toda la organización Mussollini y a sus alianzas —me informa—. Pero tenemos una oportunidad para cortar la cabeza del Underboss de una vez por todas y dejarlos vulnerables.

—Quiero que me respondas la pregunta que te he hecho, Markos —bramo.

Vittorio niega mientras sigue observando las fotos.

—Es tan idéntica que es casi imposible diferenciarla de la tuya, Hell —comenta Vittorio—. Sin embargo, hay un error en unas líneas...

—Eso es porque no lo he matado yo, stronzo²—lo insulto.

Markos le da una mirada burlona a Vittorio y este lo amenaza de vuelta. Los ignoro y levanto la mano en señal a que hable antes de que me enfade.

—Nuestros hombres lograron captar esto —me muestra otra foto. Donde Arman se ve discutiendo con un hombre al que conocía a la perfección—. Esos hijos de perra quieren culpar a la familia para que la Bratva venga a la guerra en nuestra contra y lo han logrado.

—Sobre mi puto cadáver, Di Luca —replico—. Antes de que cualquier imbécil quiera arrebatarme lo que me pertenece, prefiero destruirlo hasta hacerlo cenizas —No pienso permitir que mis enemigos tomen la ventaja sobre mí—. Hay que hacerle una visita al Capo Durán porque creo que no entendió que conmigo no se juega y que no voy a permitir que utilice mi nombre para matar a otros.

El bastado de Rubén Durán quiso venir a formar una alianza a la que supuestamente nos beneficia a ambos carteles, pero yo trabajo por mi cuenta. No necesito de imbéciles para que mi imperio siga ganando más terreno. Tomé su amenaza como un jodido berrinche, pero ahora veo que es una jodida rata que solo se tiene lealtad así mismo.

Markos asiente.

Tengo que atacar primero en esta contienda y dejar en claro que si me atacan, van a recibir más dolor y agonía del que me han hecho.

—Hell —me llama Vittorio.

—Suéltalo de una jodida vez, Caruso.

Durante todo el trayecto de vuelta, Vittorio revisó su teléfono constantemente y eso significaque información importante ha llegado a sus manos.

DEPRAVITY ||TABOO #1||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora