CAPÍTULO XXII. GHOST OF THE PAST

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Seth.

Isla de Aruba/Reino de los Países Bajos

Puerto Barcadera

Avanzo entre la maleza mientras sostengo la Heckler & Koch HK416 sobre mis manos y apunto el lente francotirador sobre la cabeza de uno de los hombres de Rubén Durán y muevo la cabeza para que mis hombres se desplieguen sobre el lugar para rodear el barco donde esta ese cabrón de mierda.

Dos Kamov Ka-52 Alligator esperan mi señal para atacar por los aires a cualquiera que intente escapar. No fallaré esta vez. Lo juro por mi Ángel que es y será la luz de mi vida.

Parece que la escena de las Islas Caimán se repite a mí alrededor, pero esta vez, el monstruo está listo para cazar a sus enemigos sin piedad.

Zigzagueo entre los árboles para acercarme al barco de Rubén. Le voy a arrebatar a la mujer que lo acompaña tal como lo hizo con las dos mujeres que me importan. Tal vez él no tuvo nada que ver con el secuestro de Hell, pero apoya a esa puta organización y eso solo me basta para que quiera arrancarle las entrañas y dárselas de comer a las pirañas o tal vez Zachary me regrese a mi fiel mascota para que se encargue de eso.

—General, el Boss está inspeccionando la mercancía que hay sobre el camarote. Creo que ese será el transporte que va a usa para ser llevado ante Durán —me informan.

Escucho el crujir de una rama y me giro con rapidez para saber quién me ha seguido durante mi trayecto. Disparo sin miramientos al ver que se trata de uno de los hombres de Rubén Durán. Ese Capo no están estúpido para venir sin protección a un escucho el crujir de una rama y me giro con rapidez para saber quién me ha seguido durante mi trayecto.

Disparo sin miramientos al ver que se trata de uno de los hombres de Rubén Durán. Ese Capo no es tan estúpido para venir sin protección a un lugar donde también podemos rastrearlo.

Me acerco al hombre tirado y arqueo una ceja ante la idea que se me cruza por la mente. Lo desvisto tan rápido como me es posible y me pongo cada una de las cosas que lleva. La gorra y los lentes hacen que mi identidad se oculte. Espero que esto de resultado o de lo contrario voy a llamar a los Kamov Ka-52 Alligator para que arrasen con todo esta mierda. Llevo el cuerpo hasta una pequeña zanja y lo arrojo sin miramientos.

Sigo andando para acercarme al campo de visión y los matones del cartel levantan sus armas. Uno de ellos viene en mi encuentro y me inspecciona de cabeza a pies.

—Ya era hora de que regresaras, Martínez. —Se traga el cuento ya que el hombre que he matado tiene un parecido a mí—. ¿Alguna señal de la CMFE o del pendejo del General Myers?

Los pendejos son ellos al descubrir que voy a masacrar su Cartel desde adentro. No sabrán que los golpeo porque será demasiado tarde para que puedan hacer algo.

—Vi a su tropa dirigirse al este—respondo—. Así que no vamos a tener ningún problema con esos idiotas.

El hombre asiente y me da una última mirada antes de darse la vuelta y camina hasta el barco donde Rubén Durán se esconde como un marica tras sus hombres. Los músculos se me tensan cuando veo aparecer a ese maldito perro con una sonrisa arrogante en sus labios.

—La reunión con la Bratva está a punto de comenzar. Quiero sus putos culos custodiando el barco todo momento. Tiren a matar si ven una que es una potente amenaza. Quiero a muertos a los soldados de la CMFE si llegan a pisar un solo pie en este lugar —dictamina sus órdenes. Aprieto los dientes y rechinan cuando ejerzo más fuerza—. Al único que quiero con vida es al General. Quiero que lo capturen y lo pongan delante de mí. Haré lo mismo con él lo que hice con su mujer. Lo utilizaré para cada una de mis nuevas creaciones hasta quebrar su espíritu.

DEPRAVITY ||TABOO #1||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora