Ocho

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Harry:Quince años.

Louis:dieciocho años.

Dos días después de que Harry tuviera su celo salieron a caminar por el pueblo. Fueron a casa de Aixa a buscar yerbas para prevenir embarazos. Las necesitarían para el celo de Louis.

Solo Louis entro para buscar las yerbas y los alfas no tardaron mucho en llegar detrás de su omega. Apenas sale ve a Liam dándole una margarita a su omega.

–¿Liam, que lunas haces? Sabes que es mi omega.

–Lo siento Louis. Mi alfa no me dejaría dejaría paz si no lo hacía. Solo pasaba Harry.

El omega pisa la flor con una mueca en sus labios y Liam sigue su recorrido bastante apenado.

Louis gruñe y el omega se acerca a el con una sonrisita.

–Ya, no te amargues.

–Es mi a amigo.

–Es un alfa. No puede pelear contra su naturaleza.

El alfa asiente a su pesar y siguen caminando.

–¿Quieres que te haga unas galletas?

–Eres el mejor omega del mundo.

–Si, pero gargame.

El omega salta y el alfa lo toma de los muslos dejando muchos besos en su cara.

🍁

Pero lo de las propuestas de cortejo no había terminado ahí.

Cuatro alfas más habían ido a casa de Harry para ofrecerle regalos en color blanco. El omega estaba estresado porque su alfa estaba estresado y molesto.

No soportaba ver que tantos alfas se acercaban a su omega y le daban elogios.

Después de unos días esto se volvió un problema en la relación y Harry decidió hacer algo al respecto.

Preparo una cena debajo del lindo árbol llorón en el que Louis siempre le recordaba que se sentaba esperar para verlo.

Y es vergonzoso pero hizo una carta y hasta armo una cajita de regalo.

Vendo los ojos de su alfa y lo guió hasta sentarse en el suelo debajo del sauce llorón.

–¿Ya puedo ver?

–Si.

El alfa se saca la venda y su boca se abre en una perfecta "O". Antes de que pudiera decir nada, el omega ya estaba nervioso.

–Antes de que digas nada. Quiero leer una carta que prepare para no quedarme en blanco.

–Adelante.

El omega saca la carta de un pequeño bolso que había tejido el mismo y abre la carta con sus manos temblorosas. Louis solo tiene ganas de besarlo.

Antes de leerla se detiene bajo la atenta mirada de su alfa.

–Pero date vuelta porque me da vergüenza.

El alfa ríe pero nunca le diría que no a Harry. Así que se da la vuelta y el omega comienza a leer.

–Louis, se que estuvimos teniendo un tipo de alejamiento luego de mi celo. Se que no tiene que ver con el celo pero si tiene que ver con las propuestas de cortejo. Y se como te sientes porque a mi me paso alguna vez. Solo quiero que sepas que nunca aceptaré un regalo de ningún alfa que no seas ti y jamás amare a ningún alfa que no seas tu. Ese es el lugar que tienes desde mi nacimiento... ya que a pesar de que algunos alfas me estén trayendo flores y regalos, tu lo haces desde que nací. Ese lugar es solo tuyo, yo soy solo tuyo y así será siempre.

Baja la carta y ve que Louis sigue dado vuelta.

–Y es por eso que hoy traje algo para ti. Date la vuelta.

El alfa se da la vuelta y el omega saca una cajita de madera pintada del azul de sus ojos. Cuando la abre ve que adentro tiene ojos de menta y ramas de canela.

Era una propuesta de cortejo.

–Se que a estas alturas no es necesario ya que somos pareja hace mucho, mucho tiempo. Pero solo quería dejar en claro que...

El alfa estampa sus labios contra los de su omega y este recibe sus labios gustoso. El alfa luego se separa y deja besos por toda su cara.

–Eres más de lo que merezco.

–No digas eso, Lou.

–Es la verdad. No podría pedir más.

–Solo no quiero que estés enojado.

–Te sacare a bailar en la noche de nuestro cumpleaños y navidad, como todos los años. Pero esta vez te nombrarán oficialmente como omega de la tribu. Yo... quiero marcarte en mi celo, oficialmente.

El omega se emociona cuando el alfa dice esto y no puede evitar chillar fuerte.

–Pero debo pedirle permiso a tu padre.

–Ay no...

La sonrisa del omega se borra. Sabía lo que iba a venir.

🍁

–¿Que? Claro que no. Es pequeño aun.

–Pero ya paso su celo. Era solo eso a lo que estábamos esperando para poder enlazarnos.

–Se ve que de tanto anudar se te exprimio el cerebro.

Harry suelta un grito ahogado y Anne golpea el brazo de su esposo.

–!No le hables así al futuro alfa de la tribu¡

Des suspira avergonzado.

–Perdón, Louis. Yo... mira, supongo que esta bien, solo aún no te lo lleves de mi casa.

–Bueno...

–Dije que no.

–Esta bien. Pero ya esta en construcción  así que en unos tres o dos años ya estará lista.

–Puedo resistirlo.

–¿Entonces si puedo marcarlo?

–Esta bien.

El omega chilla de alegría y salta a los brazos de su alfa. Besa toda su cara y Des mira a otro lado para no gruñir cuando ya vio muchos besos.

–Seré tu omega oficial.

–Ya lo eres. Desde siempre y para siempre.

Para siempre [L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora