Resurrección en Percy Jackson (PAUSADA)

Dime Tú Nombre

Me levanté de la cama con la luz del sol recién saliendo.

Bostece y estire los brazos hasta que mire a mi lado.

Allí cubierta hasta la cintura con la misma manta que yo estaba la chica rubia con unos 15 años.

Su cuerpo era visible a mis ojos y realmente me hacia sentir un cosquilleo en el corazón, sus pechos de talla B estaban expuestos y aún así lo que más me gustó de la vista fue su hermoso rostro que lucía tranquila.

Sonreí y me incline hacia ella.

- Annie... - Murmuré causando que mi novia se volteara y se cubriera con la manta como si no quisiera despertar aún.

Pero aún así sonreí mientras me acercaba a la niña y la abrazaba por detrás.

Su cuerpo estaba igual de cálido que la otra noche, cosa que me excito.

Me apoye en ella con mi miembro erecto contra su culo.

La chica se despertó rápidamente y casi con la misma velocidad se giró hacia mi.

Sus ojos grises fueron lo único que necesite para besarla en el cuello dejando una hermosa marca.

****

Annabeth.         

Cuando por fin habíamos concluido el asunto me duche y me vestí.

Pero la duche duro tal vez mucho ya que no podía dejar de pensar en lo que había pasado, mis manos habían rasguñado su espalda por lo que me sentía un poco mal pero el comparación a lo que el hizo...

Salí de la duche y lo vi allí.

Estaba tranquilo acostado en la cama donde me había quitado la virginidad.

- Jon... - Murmuré sentándome a su lado.

El chico no se movió pero sabía que él estaba despierto.

- ¿Tu me amas? - Pregunté sintiendo miedo de su respuesta.

Si de verdad el fuera un dios posiblemente fui una más entre todas sus aventuras...

- Claro - Dijo el con calma.

Fue una simple palabra que atravesó mi pecho y flecho mi corazón.

- Te voy a hacer una pregunta - Anuncie causando que el abriera los ojos con suavidad.

- Adelante - Murmuró el tranquilo.

Me mentalice y puse mis manos en su pecho.

- ¿Que eres? - Pregunté con curiosidad fría.

- Soy un dios - Dijo con calma o más bien inferencia.

Mis ojos se agudizaron mientras el se levantaba.

Dude un poco de sus palabras pero una espesa niebla blanca apareció, está tenía tal intensidad que parecía nieve.

- ¿Cuál? - Pregunté con seriedad.

El miro con desdén hacia mi y sonrió.

- No reconecerias mi nombre ni aunque lo dijiera - Murmuró el con indiferencia.

Me lancé encima de él y le hable molesta.

- Jon... te amo... pero necesito toda tu sinceridad conmigo - Murmuré con amor ya que era real - No voy a llorar por alguien que no me toma enserio así que dime. ¿Llorare por ti? - Pregunté.

¿A que me refiero? Fácil.

¿Soy solo un entretenimiento para el o se siente como yo?

Mis manos acariciaban su pecho mientras suavemente me subía encima de sus piernas.