Estaba acostado en el piso de metal mirando el techo de la camioneta mientras recordaba mi vida, más exactamente un momento bastante particular.***
Tebas.
La mujer de pelo azul suave estaba sentada en el trono del rey con las piernas cruzadas con una apariencia que no superaba los 19 años, era Sophia.
- Veo que por fin te conseguiste un hombre Alice - Se burló la mujer.
- Si pero eso no la razón por la que vine a Tebas - Dijo ella suavemente.
- Oh, veo que no eres capaz de entrenar al niño, después de todo nunca fuiste muy buena en eso - Dijo ella sonriendo como burla.
Sus ojos azules brillaron mostrando un atisbo de blanco.
- ¿Quieres que yo lo haga por ti? - Pregunto la mujer traviesa.
- Si, entranarlo, solo eso - Dijo seriamente.
- Obviamente, no me interesaría en un niño - Dijo tranquila.
La niña de 16 años sonrió y asintió.
- Claro, no llegarás a sentir cosas por el niño - Dijo Alice sonriendome alegre a mi que estaba a un costado de la sala.
- Ahora veamos que me trajiste - Dijo la mujer tronando su muñeca y parándose.
Me pare del suelo y trone mi dedo anular.
- Espero que seas una buena maestra, Sophia - Dije sonriendo.
- Obviamente - Dijo mientras una pequeña chispa aparecía en su ojo derecho.
La mujer suspiro decepcionada.
- Siempre me das mucho trabajo Alice - Se quejó.
No entendí porque dijo eso hasta que mi brazo cayo por una suave brisa.
Todo, desde mi dedo medio hasta mi hombro.
- Supongo que no soy tan fuerte - Murmuré mientras me cortaba el brazo para que comenzará a regenerarse.
- No eres nada - Dijo la mujer con voz fría mientras mis ojos se cerraban.
***
Me levanté del suelo al recordar eso.
El miedo seguía presente con solo pensar en esa mujer.
Me toque el brazo derecho con ansiedad mientras respiraba agitadamente.
Sophia era realmente aterradora, siempre calmada… siempre ideal, siempre tan fría.
Mientras yo estaba profundamente absorto en mis pensamientos note con mi visión periférica como los niños se movían rápidamente.
Escuché a los niños hablar bastante sobre un tema que se me hizo curioso.
- ¿Que harías si fuera tu padre? - Le pregunto Percy a Annabeth.
- Si fuera mi padre… lo dejaría en el hades - Dijo sin dudar Annie.
- ¿Por qué? - Pregunto Percy.
Pero ella me miro a mi.
- ¿Y tu?¿Que harías? - Me pregunto quiriendo desviar la atención de sobre ella.
- ¿Yo? - Pregunté sorprendido para luego pensar - Depende de mi humor, ahora mismo… solo quisiera que sufra sea donde esté - Dije sinceramente.
Ella suspiro y asintiendo entendiendo.
***
Pasaron una o dos horas en las que divague en mis pensamientos hasta que oí a los niños hacer algo.
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Resurrección en Percy Jackson (PAUSADA)
Fiksi PenggemarLuego de una vida sin suerte supongo que esto era lo menos que podía tener, eso pensé hasta que mi madre me contó mi origen semidivino. ¿Acaso no puedo tener una vida normal? Pero... por lo menos no me aburriré. La saga Percy Jackson no me pertenece.