Niña Estúpida

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Me reí fuertemente y tape mi ojo izquierdo con mi mano mientras una sonrisa puramente sádica se mostraba.

El fuego salió disparado contra la mantícora y mis compañeros causando que estos debieran separarse.

- El helicóptero no nos hará nada, quieren a los semidioses vivos - Les dije pensando en la única razón por la cual 5 niños todavía no fueron eliminados por un helicóptero militar.

Percy y Thalía asintieron.

- Artemisa - Dije casi en un murmuró mirando la luna - Protégenos en esta caza, ¿bien? - Pedí sonriendo mientras que decenas de flechas aparecían disparadas contra la mantícora causando que está retrocediera con una mirada atónita.

- No pueden... - Murmuró - ¡Esta en contra de las antiguas leyes! - Grito en un reclamo que solo fue respondido por la voz de una niña de piel cobriza que se hizo visible de entre los árboles.

- La caza de criaturas peligrosas está entre las obligaciones de nuestra diosa - Dijo la niña calmada mientras comenzaba a prepararse para disparar.

- Además de que nadie se quejara por la muerte de un inmundo animal olvidado en el tiempo - Dije sonriendo.

Una docena de flechas plateadas salieron disparadas hiriendo al monstruo.

Realmente me daba un poco de pena ser golpeado de manera tan unilateral... ¡Jajaja! Es broma, igual va a revivir en algún tiempo.

Percy aún envenenado era rápido y sus golpes parecían herir al monstruo, la lanza de Thalía era un poco fascinante, solamente su lanza parecía cortar con facilidad la dirá piel de la manticora, sumado a la electricidad estaba seguro de que unos minutos serían suficientes para matarle.

Antes de que la manticora sea rematada sea rematada por las cazadoras el helicóptero comenzó a disparar a los árboles obligando a las cazadoras a dispersarse y dando una oportunidad a la manticora.

La manticora se deslizó golpeando a Percy y Thalía quienes ya estaban envenenados o heridos, en ese momento como si se rehusara a dejar a la bestia viva Annabeth salto encima del mostró con un cuchillo en mano y le apuñaló con fuerza deslizando el cuchillo y dejando un gran tajo en la bestia.

Aún así, en ese situación era su única oportunidad.

En esa pequeña oportunidad (y la única que tendría) la mantícora estuvo a punto de escabullirse y saltar al acantilado con Annabeth aún arriba.

- ¡Niña estúpida! - Dije corriendo lo más rápido posible, pero ante la idea de que ella salga dañada mi corazón dolió y mi respiración se volvió irregular.

Rápidamente di un salto hacia atrás al escuchar las ametralladoras disparar.

Mi pupila brillo amarilla y una gran tormenta no tardó en destruir el helicóptero dejándome perseguir a la mantícora pero... el olor fue opacada por el mar y desapareciera.

- Artemisa - Murmuré mirando a la niña pelirroja de piel pálida.

La niña camino hasta mi lado y me miro con pena.

Respire profundamente y me levanté tranquilo.

- Bueno. ¿Ahora que toca? - Dije con calma.

Mis compañeros me miraron sorprendidos por mi calma e indiferencia pero era inevitable, aunque Thalía en particular me miraba con un odio exagerado.

- ¿Estas bien? - Pregunto la diosa entre sorprendida e indignada.

- El dolor es algo inevitable en la vida pero sufrir es opcional, Annabeth sigue viva además de que aunque muera solo debería ir al inframundo por ella - Dije tranquilo para luego mirar con curiosidad a las cazadoras de Artemisa que hablaban con Thalía, Percy y Grover.

Resurrección en Percy Jackson (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora