A-Yao

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Lan XiChen estaba un poco ansioso, quería ver a A-Yao, asegurarse que estaba bien, Nie MingJue le había hablado del embarazo, eso solo lo puso más nervioso y cuando escuchó que su memoria probablemente había sido borrada su corazón se contrajo.

¿Estaría conciente de su situación?, probablemente no, pero a como diera lugar lo iba a cuidar y le iba a procurar todo para que se sintiera mejor.

Cuando Meng Shi salió de la habitación y le dijo que A-Yao quería verlo no pudo evitar emocionarse, ¿A-Yao se acordaba de él?.

Ahora dentro de la habitación lo vió arrancar la sonda de suero de su brazo y quiso detenerlo, pero Meng Yao lo llamó por su título, no era algo que hiciera normalmente ¿qué significaba eso?.

- A-Yao -
Jin GuangYao bajó la mirada, no sabía si debía dar una reverencia como normalmente se solía hacer, tampoco podía delatarse, tal vez su falta de respeto se podría justificar con la falla de memoria.

- Zewu-Jun, disculpa mi falta de modales, me siento, me siento muy confundido -
Lan XiChen se acercó y tomó su rostro entre sus manos.
Jin GuangYao se sintió intimidado pero no sé echó atrás.
- A-Yao, ¿eres tú? -

Jin GuangYao parpadeó nervioso.
- Yo soy yo, no sé de qué me habla -
Lan XiChen estaba demasiado ansioso.
- Jin GuangYao -
A-Yao lo miró con los labios fruncidos.
- Me nombre es... Meng Yao -

Lan XiChen lo analizó de pies a cabeza, la postura, el modo de hablar, este no era Meng Yao, ¿era lo que HuaiSang había querido?, ¿traer su vieja conciencia al presente?.

Lan XiChen se acercó y lo tomó de los hombros.
- No tengas miedo, no pienso hacerte daño -
Jin GuangYao lo miró a los ojos.
Solo entonces se permitió sonreír.
- No entiendo lo que está pasando, siento que estoy en un sueño, una maldita pesadilla, Zewu-Jun, ¿tú hiciste esto? -

Lan XiChen lo llevó a sentarse en la cama.
- No, A-Yao. Tú, moriste en el templo Guanyin -
Jin GuangYao frunció el ceño.
- Este mundo cambió, yo me encerré y mi cultivo se guardo a sí mismo y me encerró con él, he pasado en esta tierra por mil ochocientos noventa años buscando tu reencarnación y hasta hace un par de años te encontré de nuevo -

Jin GuangYao le quitó las manos de encima suyo y se levantó caminando por la habitación.
- No, no es cierto, estás jugando -
Recordó ese día, Nie MingJue venía por él, una parte suya quiso arrastrar a Lan XiChen consigo, no quería sentirse solo, sabía cuánto fue el amor del primer jade por él, pero la única persona buena en este asqueroso mundo no merecía eso, él debía salvarse.

Negó y se llevó las manos a los oídos cubriéndolos.
Lan XiChen se levantó y lo rodeó con los brazos.
- No miento A-Yao, es la verdad -
Meng Yao lo volvió a empujar lejos de él.
- No me toques Lan XiChen -

El primer jade lo miró completamente roto, Jin GuangYao estaba hiperventilando, se detuvo un momento, si lo que decía era cierto, se sintió aún más perdido.

Se ajustó la ropa que tenía puesta encima y se dió cuenta que solo era una túnica interior muy ligera y su trasero estaba al aire.
- Mierda -
Rápidamente jaló la manta de la cama y se cubrió con ella.

Lan XiChen lo miró confundido.
- ¿A-Yao? -
Jin GuangYao se enrollo en la manta por completo.
- Lo siento Zewu-Jun, estoy muy confundido, no quise gritarte, antes de despertar mi cuello había sido roto, si dices que pasó tanto tiempo, ¿quién se supone que soy?, ¿que es todo esto? -

Señaló las cajas ruidosas.
Lan XiChen se acercó nuevamente y él dió un paso atrás.
- No te haré daño, en verdad, nada de lo que sucedió tiene algo que ver con las cosas actualmente -

Angel inmortalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora