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(Aclaraciónv los números y las leyes las invento yo)

Intento pasar desapercibido por ese grupo de tres hombres vestidos de traje y corbata, se perfectamente quienes son y lo que van a hacer en cuanto me vean.

La desesperación obliga a las personas a hacer estupideces, así como obligo a mi padre a pedir dinero a los prestamistas de la mafia cuando mi madre enfermo, al final nada funciono, los tratamientos impagables, los medicamentos que valían una fortuna, nada le salvo la vida.

La vida de mi madre se esfumo pero las deudas que dejo su enfermedad no se fueron a ninguna parte, todo lo contrario, se fueron acumulando hasta el punto de obligar a mi padre a mudarse nuevamente con sus padres.

Primero perdimos a mi mamá, luego nuestra casa donde vivíamos con ella, luego el auto en el que viajabamos con ella, y cuando los prestamistas descubrieron que nos estabamos quedando en casa de mis abuelos no tardaron nada en ir a buscar a mi papá ahí también, así fue como acabamos viviendo en diferentes hoteles de porquería que olían a muerto pero eran baratos, y por lo menos eran un techo sobre nuestras cabezas.

Cuando finalmente pude conseguir un trabajo las cosas mejoraron, pudimos alquilar un pequeño monoambiente al cual llamar hogar, pero el dinero que ingresaba no era suficiente para pagar lo que se debía.

Lo último que supe de mi padre hace dos semanas es que lo amenazaron de muerte y esta en algún lugar escondido, me pidio que tenga cuidado pero...¿Qué se supone que haga? Tengo que ir a trabajar o las cuentas no se pagan.

Se que sí entrego tarde el pedido las posibilidades de que el cliente se queje son altas, y ahora mismo no puedo darme el lujo de perder este empleo que es el que mejor paga de los cuatro que tengo.

Por ese motivo es que ni siquiera me paro a pensarlo, camino como sí esos hombres a solo metros de mi no hubiesen amenazado de muerte a mi padre, como si no tuviera miedo de que quieran matarme a mi también.

—Pero miren lo que tenemos acá...Park Jimin ¿Dónde esta tu padre?

Mis pasos se frenan en cuanto escucho esa pregunta, me giro hacía ellos y los miro a los ojos tratando de ocultar el terror que siento invadiendo cada partícula de mi cuerpo.

—No lo se, yo también lo estoy buscando.

Respondo con honestidad sabiendo perfectamente que si yo supiese donde esta mi padre les mentiría.

—¿Deberíamos mostrarte lo que hacemos con los mentirosos, Jimin-ah?

El más alto de los tres hombres mueve un poco su saco mientras dice esas palabras dejándome observar una pistola escondida en su cintura.

—No lo se, juro qur no lo se yo-

—Llevenlo afuera.

El que parece ser el más importante de los tres y quien siempre va por el dinero a nuestra casa dice esas palabras logrando que el pánico se apodere de mi, necesito huir pero para hacerlo primero tengo que distraerlos.

Ni siquiera lo pienso, arrojo las bebidas y comida entre mis brazos hacía ellos y empiezo a correr con todas mis fuerzas por el edificio en busca de un lugar para esconderme, se que me estan soguiendo, no quiero mirar hacía atrás, no quiero saber que tan cerca los tengo, simplemente corro por mi vida ignorando por completo el resto del mundo y entonces lo veo "Entrevistas para asistente" es perfecto, esos hijos de puta van a buscarme en todos lados menos en una sala de entrevistas para un empleo, no van a arriegarse a llevarme por la fuerza adelante de alguien más.

Ni siquiera me paro a pensarlo, entro en la sala y cierro la puerta enseguida rezando a todos los dioses que conozco porque no me hayan visto entrando.

—Debo admitir que esperaba muchas cosas para hoy, estaba preparado para todo menos para un uniformado de comida rápida.

Why Not? [Kookmin Au] 📘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora