Why Not? [Kookmin Au] 📘

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Camino por el pasillo de mi casa oscura y silenciosa, me había acostumbrado a escuchar tus pequeños pasos detras mío todo el tiempo, empezaba a dar po sentados tus dos ojos almendrados clavados en mi nuca siguiendo con atención cada uno de mis movimientos.

Es extraño, muy raro, yo, que me había acostumbrado a mi solitaria vida y estaba bien con ella, vivía con la certeza de que estaba solo y de esa forma me iba a quedar hasta el final de mi días, yo, que había hecho las paces con mi solitario destino, me encuentro justo ahora peor que nunca porque tu presencia me hizo creer que existía una escapatoria, que tal vez no iba a estar solo, que finalmente había encontrado una persona que tomara mi mano, susurrara mi nombre y me despertara de mis pesallidas con una sonrisa en el rostro haciéndome saber que todo esta bien, que el pasado esta mi en cabeza y yo soy el único culpable de que me siga acechando cada día.

Vos...vos Jimin, con esa sonrisa dulce en el rostro, con tus palabras sinceras, tam honesto como nadie lo fue conmigo en toda mi vida, no tenes ningún problema con mirarme a los ojos y decirme lo estúpido que soy, lo creído que soy, lo equivocado que estoy, porque en un mundo donde estana acostumbrado a que todos me dieran la razón llegaste para decirme que no soy perfecto, que es imposible que no me equivoque, que no soy una maldita máquina que funciona a combustible, soy solo un humano con todos mis defectos y errores encima como cualquier otro de mi especie...pero también me decís lo increíble que soy, me demostras que soy alguien que vale la pena ver, conocer, escuchar.

Sos ese alguien que me hizo darme cuenta de que, a pesar de que pueden lastimarte, vale la pena estar rodeado de personas que te quieren genuinamente y queres de la misma forma, porque sin importar lo que pase, incluso si mañana deciden lastimarme, se que los recuerdos que comparti con ellos van a seguir ahí, en mi mente, volviéndose parte de quien realmente soy, de ese alguien que solo vos conoces, Park Jimin.

Así camino, una vez más solo por las penumbras de esta casa que nuevamente me queda demasiado grande porque ya no estas acá, porque te aparte por miedo a que a la larga vos mismo te apartaras al descubrir lo que realmente siento por vos.

Estoy aterrado de que te enteres de que te amo y te odio como a la luz de día, esa hermosa y horripilante luz que te despierta a la mañana despertándote de un profundo sueño pero que al mismo tiempo es cálida y significa cada día un nuevo comienzo.

Te odio, Jimin, cuando te negas a darme a la razón, cuando me miras con esa sonrisa de superioridad cada vez que me ganas, cuando reafirmas que mi vida sin vos sería un completo desastre.

Te amo, Jimin, cuando me miras, cuando me sonreís, cuando me hablas, cuando me escuchas, cuando me despertas con esa calma que solo vos sos capaz de transmitirme, cuando me explicas en donde me equivoque, cuando te enojas, cuando haces una expresión de irritación cada vez que meto con vos.

Esa es la verdad...la verdad absoluta es que estoy perdidamente enamorado de vos.

Escucho un sonido, estoy convencido de que se trata de Oreo pero la curiosidad me hace voltear de todas formas, ahí estas, como sí hubieses escuchado todas y cada una de mis plegarias, cada uno de mis ruegos pidiendote porfavor que no me hagas caso, que no vuelvas a tu departamento, que te quedes, que me abraces, que permanezcas acá, donde estoy convencido de que perteneces.

—Jimin ¿Olvidaste algo?

No, no es eso lo que quiero decirte, pero simplemente no me da la cara para decirte que te extrañe, no se como pedirte que por esta noche vuelvas a quedarte conmigo y vuelvas mañama a tu departamento, todo eso sin siquiera saber porque viniste en primer lugar.

–¿Paso algo? ¿Todo en órden?

Te vuelvo a preguntar parado en mitad de mi sala de estar en respuesta a tu silencio sepulcral, estas ahí, parado mirándome fijamente desde la punta del pasillo que da a la puerta de salida, y no tenes forma de saberlo pero estoy aterrado de que te des media vuelta y decidas marcharte por donde acabas de llegar.