~Otra Historia nada Cliché~

19 .: El Reencuentro :.

Que tan miserable debo ser para que él estuviera ahí parado frente a mí, siendo tan especial como siempre ha sido culpándose de algo que ni sabía había ocasionado en mí.

Porque la vida se empeña en mostrarme lo que jamás podría tener conmigo, al menos no de la manera en que yo lo quiero, en que lo soñé.

'La primera vez que lo vi mi corazón simplemente explotó, pasó por mi lado, riendo bromeando con un par de chicos, fue inevitable girarme para poder grabar cada detalle de él en la mente.

Cuando papá nos llevó a aquel elegante lugar para conocer a la famosa Solar, estábamos emocionados, después de mucho volvía a ver a mi padre feliz.

Por la puerta entró una linda mujer, era sin duda del gusto de mi padre y detrás de ella, el más grande dolor de toda mi vida, era él, con su hermosa sonrisa, sus mejillas algo rosadas por los nervios supongo y su hermosa presencia, quería que fuera una broma.

-Taeyang, Jisso ellos son Solar y su hijo Jimin - nos miraste tímido y fue que aquella dulce música escapó de tus labios.

-Un gusto Park Jimin -no fui capaz ni de responder el saludo, menos de hablar durante la cena, tú solo me mirabas temeroso, supongo mi conducta te dio a entender que no me habías caído bien cuando la realidad era otra.

-Qué te pareció Taeyang?-

-Es tú vidas, papá, lo que tú sientas es lo importante - dos veces por semana Solar y tú iban a casa a comer, la tortura más horrible del mundo era verte sonreír, tus ojitos se perdían cuando lo hacías oír, tu risa era un martirio tenerte a dos pasos, pero no poder ni siquiera expresarte un poco de esto que crecía en mi interior.

Cuando mi padre anunció su matrimonio comprendí que tú jamás serás mío de la forma que yo deseaba, desde ese día en aquella oficina donde nuestros padres firmaron el acuerdo matrimonial tú te volviste prohibido para mí, no podía verte como hombre solo como un hermano a lo más un amigo.

Maldita mierda, tres años viéndote crecer, volverte más hermoso y más tierno, que ya no pude controlarme más, la primera vez fue de casualidad, salias de la ducha y entraste a tu habitación, pero no cerraste del todo la puerta, dando así una vista privilegiada de tu cuerpo, mismo que deseaba con todo mi ser, mis manos picaban por tocarlo y mi boca por besarlo.

Luego de eso todo fue en escalada hasta la maldita mierda que es ahora, odio verlo con alguien más y peor aún odio la forma en que me mira, con miedo como si yo fuera a lastimarlo cuando lo único que quiero es hacerlo feliz, hacerlo suspirar y gemir en mis brazos oírlo decir que me ama tanto como yo lo amo, pero eso jamás pasará.

Cuando todo se desató si me porté como un cobarde, lo culpe porque en mi mente él tenía la culpa, él su ternura, forma de ser tan dulce, él era el culpable de que muriera de amor cada día"

-Oíste todo, no es así? -asintió sin mirarme y no me quedo de otra que morir por dentro, nuevamente las lágrimas aparecían dios, estaba ahí delante de mí, pero ahora era más imposible que antes - maldita mierda -

-Perdón si en algún momento yo hice algo que te diera a entender que...-

-No lo hagas, no te eches la puta culpa porque me siento peor - quería tocarlo, saber si al menos aún podía sentirlo real, pero mi padre no me dejo, con furia se interpuso y ya no pude contenerlo más, tenía que hacerte saber lo que provocabas en mí con cada mirada- Te amo como no tienes una puta idea, cada cosa tuya solo me hace más estar idiota por ti, así que por favor no te culpes, esto es mío jamás debió salir de la forma que lo hizo, Jimin por favor- negó, él no quería verme había cruzado todas las líneas y ahora debía enfrentar las consecuencias - te lo suplico -le habría rogado la noche entera si con eso lograba que sus ojos estuvieran en mí.