ғᴇᴛɪᴄʜᴇ | sʜᴏᴡᴋɪ ᵎᵎ

13

Fue como empezar una batalla campal entre mordidas, jadeos y besos, cada prenda fue sacada de su cuerpo con rapidez alarmante y pronto se vieron ambos completamente desnudos y admirandose el uno al otro.

Kihyun no sabe que le gustó más, si los besos apasionados del vampiro o como tomaba su cuerpo como si ya lo conociera de toda la vida, parecía saber exactamente dónde tocar para volverlo loco y eso le encantaba.

No hubo palabras de por medio y en esta situación no las necesitaban, solo acciones que hablaban por si mismas como poesía de la más intensa arte erótica.

En cuanto el pelirrojo pudo sentir los labios del vampiro atacar su cuello mientras sus dedos jugaban con sus pezones se arqueo sin reparo y gimió sin contradicciones, esto era mucho más de lo que había imaginado, fue como destapar la botella de placer sobre su cuerpo en una droga que no se ve, solo se siente.

Jaló los cabellos del vampiro mientras esté bajaba sus manos hasta su cintura en un recorrido lento y caliente que paró en cuanto llegó a sus muslos, los acaricia de arriba hacia a abajo y sin pensarlo hasta la base de su pene, Kihyun dió un gemido gutural cuando sintió las manos del más alto rodear su miembro con firmeza antes de empezar un lento vaivén que recorría desde la base hasta la punta mientras que su mano libre jugaba con sus bolas.

Todo parecía ser demasiado pero no lo supo hasta que sintió como dos dedos del azabache rozaban superficialmente su entrada mientras que sus colmillos jugaban a rasgar la piel de su cuello, fue bastante intenso y desesperante, Kihyun quería que los hundiera, tanto sus dedos como sus colmillos pero por mientras solo recibió los dedos.

Son los movió de adentro hacia afuera con fuerza alarmante y en tijera, con su otra mano en su pene aumentó la rapidez de los empujes y lo obligó a retorcerse debajo de él, esto era divertido tanto como excitante para el vampiro quien sonrió ladino y jadeó ronco cuando la mano del pelirrojo encontró su miembro y lo acarició con lentitud tortuosa.

Hyunwoo dejó desatendido el miembro del menor para buscar entre los cajones de la mesa de noche al lado de la cama aquella botella de lubricante que todas las habitaciones poseían por órdenes de su madre, increíble que fuera esa mujer la que más los utilizara y era claro con quién.

— Hyunwoo por favor — susurró Kihyun, su voz entrecortada y rasposa apenas logró hacer que el vampiro entendiera pero lo hizo, Son puso una considerable cantidad de lubricante en la entrada del menor esparciendola con ayuda de sus dígitos para luego apartar la mano del humano y hacer lo mismo con su miembro que ahora se encontraba duro y palpitante bajo su tacto.

Tan necesitado por ser atendido que no demoró mucho en colocarse entre las piernas abiertas del pelirrojo y hundirse de un solo golpe que hizo al menor arquearse con fuerza y dejar soltar un grito ahogado.

— Oh… ¡Diablos! — el calor abrazador del interior del pelirrojo fue desconcertante para el azabache quien jadeó ronco al sentir como su interior lo apretaba demasiado bien, cerró los ojos con fuerza frunciendo sus labios y ceño, no sabía si Kihyun quería que estuviera fuera o más adentro porque su interior se negaba a abrirle paso fácilmente pero lo tomaba con hambre con cada empuje.

Empezó un vaivén lento mientras se acostumbraba al cosquilleo escalofriante en su cuerpo y se deleitaba con los pequeños gemidos amortiguados del humano por su dorso en su boca.

Tomó ambas manos y las puso sobre su cabeza.

— No te calles — pidió mientras aceleraba un poco más su ritmo — quiero escucharte.

El color carmín había adornado todo el rostro del pelirrojo junto a parte de su cuello antes de que este gimiera libremente mientras sus manos se aferraban a las del vampiro.

— Más — dijo él en medio de un jadeo sin voz — más rápido, Hyunwoo.

Son obedeció al instante y fue enfermo como amó la forma en la que el cuerpo del humano se balanceaba de arriba hacia abajo con cada empuje de su cadera y como sus ojos se cerraba con fuerza con cada espasmo.

Hyunwoo hundió sus colmillos en las clavículas del humano haciendo que este gritara con fuerza, el vampiro sabía que alguien los había escuchado aunque sea por casualidad y si fuera así bien por ellos, él les iba a demostrar lo mucho que su humano lo estaba disfrutando.

Jugó con sus pezones raspándolos de vez en cuando con sus comillos, las pequeñas protuberancias sabían saladas en su boca y eso solo lo incentivó a tomar más de ellas volviendo loco al pelirrojo que ya había soltado sus manos y ahora se encontraba jalando sus cabellos.

— ¡Ah! ¡Hyunwoo! — grito el pelirrojo mientras echaba su cabeza hacia atrás — Ahí, justo ahí, sí, sí.

Son desaceleró sus embestidas para dar paso a golpes profundos pero certeros a ese punto exacto que llevaba a Kihyun a ver miles de estrellas en un cielo azul claro.

Fue electrizante y ardiente como el infierno el sonido que provocaban sus cuerpos cada vez que se unían por completo una y otra vez, Kihyun se sujeto del cuello del azabache cuando sintió su orgasmo construirse en la parte baja de su estómago, gimió en el oído del vampiro mientras este mordía su hombro para evitar hacerlo con su cuello, en todo aquel ajetreo casi había perdido su única regla; morder el cuello del humano.

Si lo hacía el lazo estaría echo, nada podría separarlo del humano y nada podría separar al humano de él, y eso no es lo que quería, no ahora.

Fue con dos últimas embestidas que Kihyun llegó a la cúspide más alta y cayó junto a su orgasmo, su interior se apretó contra él miembro del azabache y eso le bastó para correrse en el interior del pelirrojo con un jadeó ronco y una última mordida en la clavícula de este.

Ambas respiraciones eran erráticas y frustradas antes de que uno de ellos pudiera hablar.

— Tenía razón — había dicho Kihyun sintiendo el sueño atacarlo — se siente muy bien que un vampiro te muerda.

Y cayó dormido sobre los brazos del vampiro quien con una última sonrisa lo acostó sobre las sábanas y lo observó sin estar seguro de que hacer ahora.

Había probado el cielo con el pelirrojo y le había encantado, ¿podía renunciar a eso?

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