La habitación se convirtió en un caos, todos hablaban al mismo tiempo, todos querían respuestas, todos creían que Lea era una amenaza, no sabía que hacer esta situación me superaba, mientras miro a lo lejos a Halman solo escuchar sin decir ni una sola palabra, lo cual me tenía curioso ante su reacción.
— ¿Cuándo llegarán los representantes del templo? - preguntó Halman a uno de los magos después de que todos dejaran de discutir
— llegarán para esta noche - habló esa maga que había tomado el control después de que Lea perdiera el conocimiento - en cuanto lleguen ella será trasladada al templo de la capital y será confiscada hasta que se le den fecha de juicio - ¿juicio?
— ella no irá a ningún lado - dije y todos guardaron silencio ante mis palabras - hablan de ella como si fuera un monstruo - miré a todos los presentes - gracias a ella hemos regresado con vida, pero ustedes solo dicen que es un peligro, una amenaza para todos - negué con mi cabeza cansando ante la situacion
— ¡y lo es! - dijo Adam y yo lo fulmine con la mirada, él estaba en mi contra
— al parecer todos han olvidado lo que ella ha hecho por el imperio, sin ella no hubiéramos podido recuperar la zona sur, millones de vidas se habrían perdido, ella creó las armaduras que portan nuestros soldados, ella mató a las bestias que nos superaban en número, sin ella en verdad creen que hubiéramos podido regresar con vida - todos seguían en silencio ni siquiera se atrevían a mirarme a la cara ante la verdad de mis palabras
— tu viste lo que yo vi - dijo Adam acercándose a mi - lo que ella hizo no es... ni siquiera encuentro las palabras para describirlo, reacciona Nikolay - Adam parecía estar en mi contra y sabía que no habría palabra o acción que lo hiciera cambiar
— Aun así, ella... - hable
— ella tiene que morir - dijo Halman - si no la matamos ahora el templo la usara como arma - Halman volteo a verme y después a la maga - ¿o me equivoco? -
— ¿Qué es lo que tratas de insinuar? - dijo otro mago molesto por lo que insinúa Halman
— lo que todos hemos sabido, el templo siempre supo del potencial que tenía la señorita Gold y nadie la detuvo, al contrario, fue alentada a seguir reforzando su poder, no estuvo los últimos meses entrenando con ese Mago.... el que es uno de los primeros - mire a Halman, parecía estar bien informado de Lea
— ¿Y tú cómo sabes eso? - pregunte, Halman pudo haber dado la orden de seguir a Lea durante este tiempo y yo no sabía nada, lo cual me dice que Halman no es alguien en que puedas confiar al cien por ciento a pesar de ser mi aliado en esta lucha por la corona
— ten a tus amigos cerca y más cerca a tus enemigos - dijo Halman mirándome a la cara - el templo siempre espero que su poder alcanzará su máximo potencial, lo que dicen que paso solo es un efecto de lo que el templo ha hecho con ella durante este tiempo -
— el templo jamás les haría daño a los magos - explicó la maga
— creme niña, el templo le hizo mucho daño a un mago - Halman me miró - el poder que ella tiene siempre ha sido desconocido para nosotros, incluso para el templo y lo desconocido aterroriza al pueblo, lo mejor sería matarla - Halman miró a todos los presentes en la sala - creo que es lo mejor ¿no lo creen? -
— si alguien le hace daño, no duden que iré por esa persona - dije molesto observando a todos
— no debe de mezclar sus sentimientos alteza, un buen Emperador siempre debe de ver por su pueblo, antes que nada - dijo uno más de los presentes
— entonces no quiero ser el emperador - Respondí sin dudarlo
— pero ¿qué estás diciendo? - Adam se levantó molesto - ¿estás dispuesto a abandonar todo solo por ella? - preguntó molesto
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Lea Gold: LA OSCURIDA DENTRO DE MI
Ficción histórica... Lea se lamentaba haber caído así en sus mentiras, con su último aliento miró hacia el cielo y antes de morir juró por la gran santidad y madre, que si le diera la oportunidad de renacer como Lea, si tan solo tuviera la oportunidad de volver a es...
