planes de ataque y de boda part.2

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Cabalgamos durante toda la noche para poder llegar al amanecer a la zona segura en el sur del imperio en donde ya había varios escuadrones de caballeros bajo las órdenes del príncipe, al bajar del caballo, siento como el pisó empieza a temblar, así que me sostengo fuerte del caballo y miró a mi alrededor, esperando que nadie hubiera visto mi debilidad. cabalgar así durante toda la noche hizo que mis piernas se durmieran

— ¿Estás bien? - preguntó el príncipe tomándome entre sus brazos como si me abrazara, el temblor paró, pareciera que nadie se dio cuenta del temblor de mis piernas más que el

— Si, estoy bien - ambos nos acercamos a Lord Colbert y saludamos cortés.

Nos dijeron que tenían nuestra habitación lista y que la comida estaría en unas horas, agradecemos nuevamente y nos dirigimos hacia los salones subterráneos en donde estaban nuestros aliados del sur. ellos habían venido junto a los escuadrones de caballeros para poder instalar el campamento y el equipo de ayuda a proteger la zona

— Es un honor para nosotros qué esté aquí su majestad - el Lord Colbert durante todo el camino hacia los subterráneos se la paso alabando al príncipe Nikolay dejándole ver muy notoriamente que él estaba de lado del príncipe para su camino a la corona - escuche la lamentable noticia que se comprometió, lo bueno es que en este imperio el tener amantes viviendo bajo el mismo techo es válido - el hombre río y yo bufe molesta por su comentario imprudente, aunque sabía que era verdad, en este imperio las amantes eran permitidas, muchos hombres se regocijaban al ver cuantas amantes podía tener bajo el mismo techo que su propia esposa - si me permite su majestad esta noche puedo enviarle a una de mis hijas le aseguró que el príncipe las encontrará atractivas, no sé si ha escuchado pero mis hijas son hermosa desde que nacieron y sé que se adaptaran al gusto del príncipe - yo estaba a solo unos pasos detrás de ellos, el lord Colbert lo sabía, sabia de mi presencia y aun así se atrevía a faltarme el respeto en mi cara, era claro que el compromiso del príncipe conmigo era algo que desaprueba pero esto era una falta de respeto hacia mí, este hombre tanto en mi vida pasada como la de ahora seguía siendo un hombre machista despreciable para mí y cualquier mujer cerca de él lamentaba la vida que llegara tener

— Lord Colbert - el príncipe habló con una voz firme - le pido que se abstenga de mandar a sus hijas a mi habitación, también le pido respeto por mi prometida quien está en nuestra presencia - el Lord pareció disgustado al voltear a verme, yo por mi parte solo le sonreí ya que eso parecía molestarle más

— lo siento su majestad - el príncipe paso por un lado de él, hacia la sala y mientras yo lo seguía el hombre me miró y susurro - quien la manda nacer mujer, debería de estar acostumbrada a este tipo de comentarios - río y entonces mi límite se alcanzó, en esta vida me desharé el - llegamos - él abrió la puerta y observamos a algunos de nuestros aliados qué habían llegado antes

— su majestad - todos saludaron al príncipe - señora - me saludaron cortés, pero sabía que no les agradaba mi presencia aquí después de nuestro compromiso, estos hombres me miraban como si yo fuera el enemigo al cual debían de destrozar

— ¿quiero un informe - el príncipe y yo nos sentamos y empezamos a escucharlos, yo empecé a leer los informes mientras escuchaba atenta

— las zonas acordadas han sido aseguradas, los artefactos de contención funcionan bien, no tenemos ninguna baja - respondió uno de los presentes en la sala

— ¿Así que funcionan bien? - dije con una sonrisa y miré al príncipe y el me respondió con una sonrisa también

— Si, de hecho, el mago del pueblo se sorprendió al verlo, al principio pensó que la barrera sería temporal, pero con el paso de los días hemos visto qué no es así - hablo un hombre ya grande también presentes en la habitación

Lea Gold: LA OSCURIDA DENTRO DE MIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora