Capítulo 2

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20 de mayo de 2022
Monte-Carlo, Mónaco.

Proceso de Diseño de Interiores.

Si algo le frustraba a Audrey, era esta asignatura.

La arquitectura era algo que Audrey había amado siempre. Miles de carreras pasaron por su cabeza, pero esta, siempre había sido su primera opción. Aunque claro, no había planteado nunca estudiar en una Universidad en el extranjero, mucho menos en Mónaco, ella siempre había sido muy apegada a su familia, pero todo cambió con la muerte de su madre.

Poco a poco comenzó a distanciarse.

Aquello era algo en lo que le dolía mucho pensar. Justo cuando su madre quedó embarazada de su hermana menor Regina, le detectaron cáncer. Al someterla a algún tipo de tratamiento corría el riesgo de poner en peligro a la bebé e inclusive perderla. Su mamá desde el primer instante había sido firme en que iba a luchar hasta donde pudiera para lograr su embarazo.

Fueron momentos muy difíciles para la familia. Eventualmente al no recibir tratamiento, el cáncer la invadió y por ende, logró vencerla, justo un día después del nacimiento de la pequeña Regina. El pequeño milagro de la familia. Por un corto tiempo Audrey culpó a la pequeña bebé de la muerte de su madre, aunque la realidad es que no era culpable, con el tiempo y con mucha ayuda logró entenderlo. Regina se había vuelto en su adoración. Era un recuerdo de su mamá.

Al paso de los días, la estadía en la casa en donde alguna vez vivió su mamá se empezó a volver imposible y decidió estudiar en fuera de Estados Unidos. Por lo que termino de estudiar la preparatoria en su país y al cabo de año y medio más tarde logro entrar a la Universidad de Mónaco.

Su padre se sorprendió cuando Audrey le informó sobre su decisión, recién empezaban a lograr que todo funcione sin la presencia de su madre cuando ella decidió que Mónaco sería la mejor opción. Después de irse aquel día, eran muy pocas las veces en que volvía a su hogar. Pese a los años, seguía doliendo igual. Su vida la había hecho en Mónaco, aquí estaban sus amigos y la familia Siné la habían adoptado como suya.

— El trabajo valdrá la mitad de su calificación — continuó con la explicación el profesor — planos, explicación y maqueta. Tienen dos semanas, chicos.

Audrey resopló malhumorada. El diseño de interiores no era lo suyo. La combinación de colores, telas, texturas y todo eso la aturdían. Por su parte, Charlotte estaba visiblemente emocionada, cuando giró su mirada hacia Audrey la miro con cara de pocos amigos. Sonrío y se acercó hasta donde estaba su amiga.

— Yo te ayudaré, no puede ser tan malo — dijo Charlotte en un intento de animarla pero fue inútil.

— ¿Crees que me duela si me dejo caer del techo de la facultad? — preguntó mirándola.

— Estas mal de tu cabeza, todo saldrá bien, vámonos — respondió divertida la monegasca.

— Tu estas feliz porque te encanta esta maldita asignatura — mascullo malhumorada Audrey — yo soy torpe para esto del diseño de interiores.

— El problema es que eres perfeccionista — contradijo Charlotte mientras caminaba con Audrey hacia su jeep — atrévete a negarlo.

— No es verdad.

— Por dios, no te conoceré, Drey — resopló Charlotte mientras se subía al auto para que partieran rumbo a su departamento.

How you get the girlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora