Capítulo 32*

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12 de septiembre de 2022
Monte-Carlo, Mónaco

Pierre regresó el yate al puerto de Monte-Carlo, antes de bajar de ahí la tomó de la mano para ayudarla y caminaron hasta donde el francés había estacionado su auto. Pierre empezó a conducir hasta el edificio donde había comprado su departamento, no estaba tan lejos de ahí, a unos cinco minutos en el auto.

Audrey lo miro confundida al ver que entraba a un edificio — que estaba en un lugar muy exclusivo y lujoso de Mónaco — para estacionar el auto en un lugar que tenía su apellido.

— ¿Que hacemos aquí?

Pierre sonrió y en vez de responder, se apresuró a bajar del auto para ayudarla a bajar a ella. Audrey sonrió al ver el gesto del piloto, una vez que el le extendió la mano para que bajara.

— Andamos muy atentos hoy... — bromeó Audrey.

— Venga, pulga, deja de atacarme.

Audrey se rio un poco y se acercó a besarlo en su mejilla, muy cerca de sus labios.

— ¿A que vinimos aquí? — preguntó Drey.

— Vamos a subir.

— ¡Ya dime! — se quejó Drey haciendo reír a Pierre.

El camino en el elevador fue en silencio, a Pierre le daba un poco de gracia la forma en que Audrey golpeaba su pie contra el suelo del elevador, señal clara de su nerviosismo. Las puertas del ascensor se abrieron mostrando una sola puerta al final del pasillo.

Pierre la empujó ligeramente de la cintura para que Audrey saliera del elevador, tal pareciera que sus pies se habían pegado al suelo, el francés se apresuró para abrir la puerta del departamento para que pudieran entrar.

— ¿Que es este lugar?

Pierre abrió la puerta soltando un suspiro largo, se encontraba muy nervioso, se apartó para dejar pasar primero a la chica, quien miró impresionada el lugar, lo primero que hizo fue caminar hasta la ventana en donde se podía ver el mar, pese a que ahora estaba en oscuridad.

El francés caminaba detrás de ella mirando con una sonrisa sus expresiones de asombro.

— Este lugar es grandioso, mira esta vista — dijo Audrey maravillada — ¿que hacemos aquí?

— Quería que conocieras mi nuevo hogar.

Audrey volteó hacia él con el ceño fruncido.

— ¿Tu nuevo hogar? — preguntó con un hilo de voz.

Pierre asintió.

— Mi nuevo hogar — afirmó sonriéndole mientras caminaba hacia ella —. Ya no me interesa estar en Milán, si lo que más me importa vive en Mónaco... no quiero estar ni un segundo lejos de ti...

Los ojos de Audrey comenzaron a cristalizarse, Pierre le estaba demostrando con creces que realmente la quería en su vida, que quería intentar todo con ella.

Le estaba demostrando que realmente la quería.

— Pero tú en algún momento me dijiste que... — Audrey tomó aire, intentando controlar sus emociones — no te gusta Mónaco para vivir... Milán siempre fue tu sueño... tu lugar ideal para vivir.

— Mi sueño eres tú, estar siempre contigo, pulga — Pierre le acarició el rostro sonriendo — si tengo que renunciar a Milán para verte siempre que esté libre de la Fórmula 1, que así sea...

— Yo no quiero que seas infeliz — susurró Audrey dejando que una lágrima brotara de su ojo —. No quiero que renuncies a cosas por mi culpa, Pierre...

How you get the girlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora