Compañero de clases- Austin Mahone y tú

Capítulo 5

Narra (tn)_______:

Me senté con Austin, lo recorrí con la mirada cuando... Su amiguito estaba despierto, reí por lo visto, pero me ruborizaba al mismo tiempo.

Austin me miró extrañado, no sabía de lo que me reía

-¿Qué te pasa? -dijo a la bajo, seguro el también sabía porqué me reía

-Nada, solamente que podrías controlar a tu amiguito -Bajé la mirada a su entrepierna para insinuarle que lo había visto.

Se acerco a mi quedando sentando muy cerca mío, me sobresalte. El se acercó a mi oído con delicadeza

-No puedo si estas vestida así -susurró en ellos para después rozar sus carnosos labios por este.

Una oleada de calor y frío me inundó al escuchar esas palabras tan... seductoras. Sabía lo que estaba haciendo, quería jugar, y yo no me iba a quedar atrás, alargué mi mano para agarrar otro libro, y cuando lo atraía hacia mi, mi mano rozo levemente su miembro ya erecto.

No pude evitar soltar una risita, después miré a Austin, y este estaba con los ojos cerrados.

Punto para ______.

-Tranquilo Austin -reí y el después abrió los ojos.

-No juegues conmigo _________, sabes que ganaré.

-No, no lo creo.

Acercó sus labios a mi cuello, para pasar su lengua por ahí, me estremecí por su contacto. ¡Joder, me encanta este chico! No, (TN)_____ en que estas pensando.

Me aleje inmediatamente, Austin me miró confundido. Se acercó nuevamente a mi, solo que esta vez sus labios se dirigian a los mismo, una vez cerca nuestras respiracones comenzaron a mezclarse, sin previo aviso Austin me besó lentamente, yo le seguí el beso tras pensarlo dos veces, esto estaba mal, pero no podía alejarme, sus labios eran tan... embriagadores que era casi imposible separarse. El beso fue aumentando el ritmo, Austin me agarró de la cintura y con un movimiento rápido yo me encontraba arriba suyo, sentía su miembro erecto en mi muslo derecho, lo que me hizo soltar un pequeño gemido en sus labios.

Austin, por su parte dejó escapar un jadeo al contacto de estos. Bajó sus besos hacia mi cuello, yo se lo permití, pero después me dí cuenta de lo que estaba pasando. Me separé bruscamente, saliendo de encima suyo, y reincorporándome.

-Austin... no.

Traté de recuperar el aire y controlar mi respiración. El también se sento bien en el sillón, miré sus labios tenían el doble de grosor debido al beso, también estaban de un color más fuerte. Los míos también deberían estar así, por los que me los cubrí con mi brazo.

-Tienes razón, perdón.

Dicho eso seguimos estudiando hasta que el se tuvo que ir, quedamos en que mañana yo iría a su casa.