𝐋𝐨𝐯𝐞 𝐆𝐚𝐦𝐞 [Pausada]

Bienvenidos a Las Nevadas...

-Jschlatt-

Narrador omnisciente:

El plan del híbrido era simple, de tan solo tres pasos.

1.- Buscar cómo abrir portales para que los habitantes del resto de naciones lleguen más rápido.

2.- Abrir los portales.

3.- Ganar dinero para que su papá no le cierre el casino.

Primer paso, hecho, hace dos meses descubrió que habían un sin fin de naciones no muy lejos de la suya, en su búsqueda de información descubrió el como conectar con portales las naciones, pero el crear estos iba ser difícil, buscar y crear varías cosas para que estos se abrieran.

¿Fue difícil? Si, así que esperaba que todo saliera bien con las visitas de los extranjeros, había mandado a su gente a publicitar su casino para el día de la reapertura de este después de mejorarlo.

El tiempo pasó rápido y cuando el día esperado llegó los nervios empezaron a carcomerlo, miró a su amigo George que estaba junto a otros de sus trabajadores estaban a punto de activar los portales.

Entonces el evento por el cual casi todos los habitantes se reunieron dió inicio, los portales se abrieron y las primeras personas cruzaron.

Una vez cruzó un buen número de gente los guío hasta su casino, el mayor lugar de atracción para los mayores.

- Damas y caballeros, sean bienvenidos a Las Nevadas...

Dió un discurso antes de dar pasó a los visitantes.

Juntó a George empezaron a apostar con algunos hombres, todo marchaba perfecto a lo planeado, había más gente que nunca, era simplemente perfecto.

Cosa que se arruinó cuando junto a este se dirigieron a la barra, esperando algo que pueda saciar la sed que tenían, en la espera de sus bebidas un par de chicos que ellos bien conocían, se acercaron.

- ¿Les invitamos algo?

Jschlatt y Dream, George hizo una mueca de disgusto cuando escucho al par, se giró en su lugar tratando de ignorar su presencia al igual que Quackity.

- Oh vamos, ¿siguen enojados por eso?

No podían creer lo que decía el de máscara, era claro que seguían enfadados, Dream dejó a George, a su mejor amigo, justo en un momento difícil, además de que con una deuda, ya que ni siquiera pago la mitad de la renta el mes antes de su partida, el de lentes se arrepentía de aceptar ser rommie del rubio, y el de cuernos se había ido de Las Nevadas sin decir nada, aún siendo pareja del de gorro

- Chicos, ya les mandamos cartas de disculpa, no pue-

- ¿Felipe, te puedes apresurar?- Quackity sólo quería que le den su bebida antes de que sus instintos le ganen y termine golpeando al par.

- ¿Solecito, hablemos si?- El híbrido de cabra se trató de acercar hasta que fue interrumpido por un emo ojirubí .

- ¿Quacks?

- ¡Felipe, las bebidas!- Le gritó ahora al bartender, si antes su día se había arruinado un 40% por los otros dos, ahorita estaba arruinado al 70%.

Miró a Felipe, este trabajaba lo más rápido posible, ese día la gente había llegado a montones y al ser sólo dos y varios pedidos, el trabajó de había vuelto muy duro.

- Luzu, por fin te encontré, ¿dónde...- Juan que había acompañado al ojirubí, miró sorprendido al patito, abriendo de más los ojos y su boca formó un círculo.- No puede ser, ¡Quackity!

- ¡Felipe, las putas bebidas!- El pobre Felipe, pensaba en renunciar, su jefe le daba miedo enojado.

No estaba enojado, pero frustrado si, sus ex aparecieron otra vez en su vida, el mismo día que el pensaba iba ser el mejor en toda su existencia, pero no, ahí tenían que llegar esa manga de idiotas a joderle su día y lo peor fue que George había desaparecido con el desgraciado de Dream.

- Esperen, ¿Ustedes de dónde conocen a mi novio?- Preguntó Jschlatt, mirando con desagradó al mago y al emo.

- Es mi ex.- Dijo el ojirubí, mirando al de cuernos con desconfianza, si se supone que era su pareja, ¿por qué no estaba pegado a el? El muy bien conocía al pelinegro y era demasiado meloso con sus parejas así que posiblemente esté mintiendo.

- Yo soy su casi algo.- Está vez dijo el mago, tratando de acercarse al menor de los otros que golpeaba su cabeza con la barra varias veces.

Si antes tenía ganas de golpear a Jschlatt, ahora tenía ganas de matarlo, cómo siquiera tenía los huevos de decir eso cuando lo dejo, con seis meses de relación, problemas mentales y sólo le había mandado una carta donde decía: "Mi solecito, espero me perdones por irme de la nada, pero descubrí que tengo un hijo y ahora quiero conocerlo, te amo"

¿¡Cómo siquiera se reacciona a eso!? Literalmente el día anterior habían tenido una hermosa cita, jurando al otro su amor eterno y al día siguiente recibir una carta de tu novio dónde decía que tenía un HIJO secreto y ni siquiera te decía cuando volvería.

Eso le pasaba por meterse con tanto hombre mayor.

- ¡Chingada madre Felipe, hasta cuándo voy a esperar la puta bebida!- Su voz sonó tan enojada que hasta asustó a sus ex.

- Hey, amor, tranquilízate, ya Felipe te dará tu bebida.- Jschlatt lo tomó de los hombros, masajeando estos.

- No me digas así y te recuerdo que tú y yo no somos nada, maldito aborto de cabra.- Quitó las manos del de cuernos de sus hombros y miró a Felipe con brillos en sus ojitos, se estaba acercando con su preciada bebida, una vez le arrebató está para darle un buen trago, prácticamente casi se lo teemina, se giró a ver los tres, apuntando a cada uno con su dedo.- Se los digo desde ya, que no se les ocurra volver a acercarse a mí su no quieren el cuello rajado, banda de estúpidos.

Y se fué de ahí todos digno a su hotel, ahora más que nunca necesitaba un descanso, ver a sus ex le trajo malos recuerdos, lo que pasó con ellos fue todo un casó que no quería recordar nunca más en su vida, esperaba que el día siguiente ellos ya se fueran, su sueñito no se iba a cumplir.

Volviendo donde quedaron sus ex, Luzu sonrió grande al escuchar lo que dijo el menor.

- Yo le enseñe lo de subnormales, estoy tan orgulloso.

No sabía que eso iba a iniciar una discusión de quién le había enseñado más insultos al patito.

Que estoy haciendo
Alguien pareme porfas