Siempre pensó que estaría solo, conquistaría al universo, asesinaría a Freezer, por fin cobraría venganza, pero, las cosas cambiaron. En un gran juego del destino, Vegeta llegó a la tierra y conocío a Bulma y sin darse cuenta, estaba completamente e...
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Ahí estaba el palpitar de su corazón, apenas era consciente de ello, ¿como pudo ser tan ciego? Por un maldito momento no sintió nada, ni lograba controlar el odio, estaba vacio, totalmente vacio, pero al regresar lo supo, había puesto en peligro la tierra, su hogar, el hogar de su esposa e hijo, ¡casi pudo matarla y no le importaba! Estaba jodidamente arrepentido.
Y ahora, ahí estaba su hijo, Trunks, su Dios de la batalla y la justicia, mientras él hablaba sintio la misma sensación de cuando lo conocio. Hogar, eso sentía, temía ver a Bulma y que ella estuviera decepcionada... Les había fallado, pero... Ahí estaba su hijo, emocionado, feliz y lo veía como siempre lo hacía.
Joder, ¿merecía ese amor? ¿merecía el amor de la mujer terrícola qué nunca dudo de él? ¿merecía ese amor ciego de su pequeño?
No, se sentía muerto en vida.
Trato de buscarla, aún con su unión, eso que le permitia compartir sentimientos y entenderse, a su manera quiso pedirle perdón, esperando que ella lo sintiera. Pero sobretodo, que ella no rompiera su unión, era algo sagrado, eran un alma en dos cuerpos... " Bulma, aún sigo aquí, pero tendré que irme, no llores, sé fuerte... Aunque ya no este, siempre serás mi esposa, mi mujer, mi compañera... La unica. "
Suspiro, viendo a su cachorro frente a él, sentía un nudo en la garganta, el tiempo estaba contado, Piccolo y Krillin enfrentaban a Majin Boo, retrasandolo, mientras que él aún malherido se arrodillo quedando justo frente a su hijo, — Trunks... Jamás pedí esta vida, mocoso, no lo hice, era un ser despiadado, hasta que conocí a tu madre, — él pelila lo observaba asombrado, incapaz de interrumpirlo, — habia sido la única persona que creyó en mi, aún siendo lo que era, creí que seria la única, hasta que llegaste tú, enano, admirandome ciegamente, siendo mi hijo... — tomó aire, realmente odiaba dejarlo... No queria que viviera lo mismo que su versión adulta, él lo extrañaría más, ambos lo harían, — siempre me pregunte, ¿si él supiera mi pasado en algún momento dejaría de disfrutar pasar tiempo conmigo? ¿me temeria? — en ese segundo, Trunks lo interrumpió.
— Siempre supe tu pasado, Piccolo me lo conto cuando tuve la capacidad de entender y entendí todo, mamá me dijo que no tuviste una familia, ni un padre... Y por eso te esforzabas por serlo para mi, — le regalo una sonrisa que solo un niño podía darle. — por eso te admiro, papá... Jamás te temería, eres mi papá, mi héroe.
