18. Jaque Mate

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Pensar en cómo la vida pasa tan lentamente, hace unos días tenía a mi tía aquí en casa, peleando por mí y mi hijo

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Pensar en cómo la vida pasa tan lentamente, hace unos días tenía a mi tía aquí en casa, peleando por mí y mi hijo. Por nosotros y defendiendo a Alissa. La tuve abrazándome, cocinándome y escuchándome. Era como un maldito sueño todo esto.

Desde que Aubrey nos dio la noticia, todo en mi cabeza se volvió un revoltijo de emociones, podía casi escuchar a mi tía pedirme que hiciera las cosas bien, que fuera con Alissa y nuestro hijo. Pero sabía que eso era lo que yo debía hacer. No pude hablar con Ann en el avión, ni mucho menos cuando se estaba realizando el velorio de mi tía. No creía que fuera el mejor momento para hablar de aquello con ella y mucho menos en ese lugar. Mi tía había sufrido un accidente de auto, mi madre la culpaba por su manera de conducir; pero la policía nos había dicho que fue culpa de un tipo que veníaen estado de ebriedad. Pero hasta muerta, mi madre seguía juzgándola; ¿podía existir alguien tan cruel? Yo pensaba que no, hasta que mi madre comenzó a actuar así con su propia hermana. Mi padre por su parte, se había encargado de organizar un gran velorio y entierro, para mi tía, de esos grandes y coloridos que ella siempre deseo. Era como si una parte de ella siguiera entre nosotros.

El funeral era esta tarde del 2 de enero; pocas personas del pueblo irían, muchos no lo hacían por su historia de nacimiento y por qué mi madre seguramente les sugirió que no perdieran su tiempo; era un día difícil para nosotros como familia. Killion y Cloyce estuvieron junto a mí, aunque Kill se encargó de averiguar si en ese accidente iba Alissa, por fortuna, ella estaba en casa de mi tía cuando eso paso y se enteró del accidente primero que todos... ella había avisado a mi madre.

Estábamos en el cementerio; mi madre y mi padre en los primeros asientos; observando a el ataúd, mis hermanos y las chicas estábamos detrás de ellos, ellas siendo ese momento de paz que necesitábamos. Algunos familiares y amigos detrás de nosotros; el padre estaba diciendo unas palabras; algo que mi tía seguramente estaba odiando; por que no creía en las religiones y menos en la católica, pero este funeral había sido manejado por mi madre, entre más pronto terminaran, mejor para ella.

Cuando las cosas van mal y no hay solución; el mismo universo se encarga de darle una pronta solución; cada cosa que sucede es por algo. Mi tía había dicho que me ayudaría a hacer lo mejor para mí y mi hijo... sin embargo, no pensé que sería de esta manera.

—Pero... ¿Qué hace aquí? —La voz de descontento sale de mi madre.

Killion pellizca mi pierna para que observe al frente; y es ahí cuando todo se detona.

Alissa venía de negro; su camisa dejaba al descubierto un pequeño vientre; ella lucia agotada, pálida y con ojeras notorias. Como si fuera un fantasma, camino hacía el ataúd de mi tía y con lágrimas en los ojos acaricio la madera, la observo susurrarle algo, su pecho sube y baja rápidamente, como si en cualquier momento fuera a salir de su pecho, sin embargo, mi mirada vuelve a viajar a su vientre. Estaba a tan solo centímetros de mí y la necesidad de ir hacía ella, me invadió.

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