(DISPONIBLE TAMBIÉN EN SUEÑOVELA)
[Borrador]
Curiosa, misteriosa y humana.
La vida normal de Ice empezó a cambiar cuando sucesos o más bien individuos misteriosos comenzaron a aparecer en su vida. Blak; Maximous Blak fue lo primero, el chico por...
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"¿Y si estaba jugando conmigo y había caído en sus encantos como una estúpida?"- pensó Ice, mientras miraba su perfil. Había escuchado algo y se había asomado por aquel agujero pequeño.
De repente se había separado de ella como si su toque le quemara, y le dolió. No podía negarlo, no podía mentirse a sí misma.
Había caído ante los encantos de Maximous Blak. Alguien que no conocía, alguien impredecible.
¿Y si le había mentido? ¿Y si solo estaba jugando con ella?
Hasta que sus ojos se encontraron y todas las dudas se esfumaron.
" ¿Por qué tiene tal poder sobre mí? ¿Porque deje que pasara?" - su mente no dejo de darle vueltas al asunto.
Blak comenzó a acercarse a ella, sus ojos no perdían la conexión. Y en ellos Ice vio algo más, algo que no lo había visto antes; vulnerabilidad, miedo.
-¿Qué...?- al instante Blak le tapó la boca y le hizo un gesto de silencio.
Sus miradas no se apartaban, hasta que finalmente Blak tuvo que hacerlo, sin quitar su mano de la boca de Ice.
-No solo es Luke- comenzó a susurrar más calmado. Ice colocó sus manos en la mano de Blak y la retiró de su boca- todo el Concejo está tras nosotros-
Dos pares de ojos lo observaron horrorizados.
"¿Así que todo este tiempo no solo fue Luke sino que también todo el Concejo?"- la respiración de Ice se volvió irregular.
Había creído en Luke, en un hombre que quería rescatar a su amigo. ¿Todo este tiempo la había manipulado? ¿May también lo había hecho?
Había tratado de convencerse todo este tiempo de que Blak mentía, de que él era el verdadero peligro. Pero al final de cuentas, Blak no se había equivocado.
-¿Estás seguro de que son ellos?- el susurro de Ruth se quebró al final, como si aquello fuera la mentira más grande que había escuchado.
-Ellos están afuera- al instante los ojos de Ice fueron hacia su amiga, la cual no podía creerle, no podía pensarlo siquiera.
- Ruth- su avisó llamó la atención de su amiga y se miraron. Como si compartieran un secreto oscuro.
Ruth tragó en seco y asintió, como si aquella fuera una forma de comunicarse telepáticamente.
Recordando algo importante.
"- Estaba en un orfanato. Mis padres habían fallecido cuando tenía 9 de un accidente. Soy hija única, además de no tener algún otro familiar, alguno que se hiciera hacer cargo de mi al menos- el silencio siguió, con lo que algo oprimió mi corazón, ¿era pena quizá o empatía?- no quiero tu pena, ni tu "lo siento". Aquellas palabras tienden a ser hipócritas- cerré la boca. ¿Acaso me leía la mente?
