- Por favor toma asiento - dijo el alfa con un voz profundo que lo cuativo.
Se sento en la silla un poco aturdido por el cumulo de emociones que tan solo en un momento habia experimentado.
Su padre y el señor Theerapayankun empezaron a hablar sobre sus planes, el ignoro todo lo que decian, solo asentia cuando decian su nombre. No podia creer que lo trataran como si fuera una moneda de cambio.
-Pete
Levanto la vista cuando su padre repitio su nombre por cuarta vez, sacandole de su ensoñación.
-Si.
-Le decia al señor Theerapayankun que creo que es lo más conveniente para ambos hacer una fiesta de compromiso este fin de semana
Tanto el alfa que se encontraba a su lado y por lo poco que sabia se llama Vegas y él dijeron al unisono -El fin de semana?
-Si, el fin de semana, entre más rápido acabemos con esto mejor -dijo el señor Theerapayankun.
-Creo que te estas precipitando demaciado, padre -respondio Vegas.
-Ya hablamos sobre esto, no quiero peros.
El alfa solo se acomodo en su silla y guardo silencio.
-Papá yo opino lo mismo que él, creo que es demaciado pronto. Ni si quiera nos han presentado formalamente -Pete buscaba la manera de ganar tiempo, sabía que al final terminaría casado con ese alfa, pero por lo menos esperaba tener un poco más de tiempo para asimilarlo.
-Bueno en eso tienen razón - respondió el señor Saengtham - Pete, te presento a Vegas Theerapanyakul, Vegas te presento a Pete Saengtham.
No sabía si su padre buscaba solo ser sarcástico o en verdad pensaba que con eso solucionaba todo los problemas.
No quiso preguntar.
-Padre, señor Saengtham, en verdad creo que necesitamos más tiempo... Ya saben para organizar la fiesta y todo - Vegas al igual que Pete no estaba listo, para ser honesto jamás lo estaría pero quería por lo menos mentalizar lo que pasaría.
Había percibido el aroma de Pete, denotaba enojo, pero sobre todo tristeza. Su lobo arañaba dentro de él pidiendo que lo protegiera, pero jamás pensó tener tanto autocontrol para evitar hacerlo.
Sabía que su padre se enojaría, pero prefería correr el riesgo.
-Vegas, ya hablamos de esto. Este fin de semana será, y es mi última palabra y si tanto quieren conocerse, pues adelante, el señor Saengtham y yo tenemos unos asuntos que atender así que disfruten lo que resta de la noche juntos. - Kun Khan y el padre de Pete se levantaron de sus asientos y salieron del restaurante.
Habían pasado algunos minutos desde que se quedaron solos y ninguno de los dos había dicho alguna palabra. El alfa frente a él se encontraba mirando su teléfono y no lo prestaba atención. Tampoco es como si quisiera su atención, pero se le hacía una falta de respeto que lo ignorara tan olímpicamente cuando estaban cenando juntos. Bajo la vista hacía su plato.
Su abuela siempre la había dicho que cuando se como con una persona hay que ser atentos y convivir para que la comida se aproveche mejor.
Quiso decir algo pero no sé le ocurría qué, así que regreso la vista a Vegas. Era bastante atractivo, no lo iba a negar, pero se veía triste o al menos eso Pete pensó. Siguió pasando su vista por el rostro del alfa, tenía sus rasgos bien definidos, pómulos altos, barbilla afilada, naríz recta, cejas pobladas y unos ojos negros como la obscuridad.
Definitivamente tenía cara de fuck boy, pensó Pete bajo la mirada al mismo tiempo que sonreía por los pensamientos que se le ocurrian.
-Hay algo en mi cara que causa tanta gracia? - Su sonrisa se borro cuando escucho a Vegas hablar, lo miro con las mejillas sonrosadas y nego rápidamente.
El alfa lo miraba con una cara imperturbable, lo que hizo que se encogiera en su asiento y su lobo se entristeciera.
- N-no, no, disculpa es que... Me estaba acordando de un chiste que me contó mi abuela -contesto de manera nerviosa.
-Pues seguro tu abuela es una buena comediante - Vegas volvió su vista a su teléfono.
Pete se quedó un segundo más observando a la persona frente a él, estaba dispuesto a comenzar una conversación pero el mesero llegó con el postre.
Sirvieron Leum Kleum, Pete no era amante de lo dulce así que prefiero dejar su parte. Pero no pasó desapercibido como Vegas prácticamente devoró el suyo.
-Te lo vas comer? -pregunto el alfa señalando el postre de Pete.
-No, soy más fan de lo picante que de lo dulce, además ya estoy muy lleno -contesto.
-Bueno tu te lo pierdes.
Tomo el postre de Pete y también lo engulló.
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Amor Obligado
RomansaPete es un omega risueño y soñador, que todo su vida a esperado encontrar a su persona destinada, con la cual compartir la clase de amor que sus abuelos tuvieron y que su abuela le plática, ese amor que dicen, solo aparece en los cuentos de hadas. ...