Eddie.
—Estás loco, no voy a ayudarte con nada que tenga que ver con...eso. —Steve hablaba torpemente mientras apuntaba a mí entrepierna.
—Tranquilo, era una broma. Solo... esperaré a que se baje. —Steve retiró su vista de mí, vió por la ventana y se cruzó de brazos. —Aunque si me prestas tu baño...
—No, de ninguna manera. —Yo reí ante sus palabras, me senté en la cama. Steve se levantó de la cama y me dió la espalda. Yo observé su cuerpo. Se agachó para tomar su pantalón de pijama y se vistió. —Te espero abajo en lo que te pones algo de ropa. Tenemos que irnos o llegarán mis padres.
—Está bien. —Steve salió de la habitación y cerró la puerta. Yo suspiré. Intenté controlar mi respiración, esperé a que mi erección bajara. Comenzó a doler un poco, pero aún así tomé mis pantalones y me vestí. Tomé mis zapatos y me los puse. Tomé mi chaqueta y abrí la puerta. Bajé las escaleras directo a la sala de estar.
—Te prepararía el desayuno, pero no tenemos tanto tiempo. —Me encogí de hombros, sonriendo, qué ternura, me quería preparar el desayuno.
—No te preocupes, iré a ver a mi tío al hospital y después comeré algo. —Pasé a un lado de él y lo tomé por la cintura para hacerlo a un lado. Él miró mi mano y después mis ojos, rápidamente se volteó. Sin hacerme ilusiones, podría jurar que se puso nervioso ante mi tacto. O tal vez son ideas mías.
—Me pondré otra ropa, por ahora espérame aquí. —Asentí y lo ví alejarse hacia su habitación. Iba a sentarme en el sofá y escuché como tocaron la puerta. Sentí mi corazón acelerarse, si eran los padres de Steve seguro habrían problemas. Miré por la ventana y ví a una rubia parada detrás de la puerta. Tocó de nuevo. Yo abrí la puerta.
—Hola.
—¿Hola? —Su rostro se veía confundido. —¿Está Steve?
—Sí, está arriba, se está vistiendo. ¿Tú eres Robin? —Ella asintió, me hice a un lado y la dejé pasar. Susurró un leve "gracias" y se adentró en la casa. Se sentó en el sofá, yo me senté a un lado de ella.
—¿Y tú eres Eddie? Bueno, Dustin no para de hablar de tí. Y supongo que lo eres porque Dustin mencionó que tienes el cabello largo, tienes tatuajes, te vistes algo raro y pareces de higiene dudosa.
—¿Disculpa? ¿Higiene dudosa? —Ella asintió intentando no reír. —Para tú información, me baño todos los días.
—Se nota. —Tapó su boca luego de decir eso, riendo en voz baja.
—Y yo supe que eras Robin porque Steve me habló de tí, dijo que eras una rubia algo habladora, que le molesta todo, que está en la banda como toda persona rechazada social con pocos amigos y además lesbiana. —Ante esto último ella abrió sus ojos bastante, miró hacía arriba maldiciendo a Steve, yo no pude evitar reír.
—Lo mataré. —Hizo una seña de asfixia con sus manos y reí aún más. —¿Qué es tan gracioso?
—No dejaré que lo mates, después quién será mi crush secreto no tan secreto. —Ella rodó los ojos y después procesó lo que había dicho, tapó su boca con ambas manos. Negó con la cabeza.
—¡No puede ser, tú eres el otro homosexual de Hawkings! —Yo asentí con la cabeza. —Dios, jamás lo hubiera imaginado. Espera, ¿te gusta Steve?
—Tienes que mantenerlo en secreto, por favor, apenas somos amigos y seguro no me vería de la misma forma. Dormimos juntos está noche, sin hacer nada, obviamente, pero me sorprendí cuando desperté y lo ví a mi lado. Fue el mejor momento de mi vida. Y luego dije algo estúpido, y ahora está raro conmigo. No quiero joder la amistad que estamos formando.
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"Dos diferentes tipos de azul" Steddie
ContoEddie es un "freak", rechazado social con pocos amigos que amargamente pasa sus tardes leyendo en un parque, siempre observando a los demás, atrapado en su propia mente y pensamientos que no se atrevería a decir en público, aquel lugar que daba paz...